El Tribunal Constitucional ha admitido a trámite el recurso que presentaron los diputados de Vox contra el Real Decreto de medidas urgentes para la reforma laboral, la garantía de la estabilidad en el empleo y la transformación de trabajo.
Según ha informado este jueves el órgano de garantías, el Pleno ha acordado analizar el mencionado Real Decreto-ley 32/2021, de 28 de diciembre, a petición de la formación liderada por Santiago Abascal.
La formación llegó a reprochar a las puertas del Constitucional que la reforma se aprobara mediante la figura del Real Decreto Ley pese a que en el preámbulo dice querer corregir "importantes desequilibrios que el mercado laboral español arrastra desde hace décadas". A su juicio, se trata de un "abuso" que el Gobierno ha convertido "en una herramienta para imponer su voluntad".
Vox, además, recordó la polémica suscitada por esta norma no sólo por los "vicios de procedimiento" que habrían "afectado a su tramitación" como proyecto de ley, sino también por la votación, que salió adelante por un voto.
Examinar algunos artículos
El partido también pidió que se examinara el artículo cuarto del Real Decreto-ley 1/2022, de 18 de enero, por el que se modifica el Real-Decreto ley antes mencionado de medidas urgentes para la reforma laboral, la garantía de la estabilidad en el empleo y la transformación del mercado de trabajo.
En dicho apartado, se establece, entre otras cuestiones, que los contratos por tiempo indefinido y los fijos-discontinuos podrán celebrarse cuando resulten "esenciales" para el cumplimiento de los fines que las administraciones públicas y las entidades que conforman el sector público institucional tenga encomendados, previa expresa acreditación.
Ahora, el Pleno del tribunal de garantías ha acordado atender la solicitud de Vox y estudiará el fondo del recurso de inconstitucionalidad planteado.
Titiritero
Compárese la actuación de VOX y la del PP...
Alexander
Quien se equivoca es Ud. El año 2.014 se realizó un referendum en la península de Crimea (no en el Donbás) y la mayoría de la población (casi el 90%) expresó su voluntad de que Crimea se reintegrara en Rusia, a la cual había pertenecido desde que Catalina la Grande se la arrebatara al Imperio Otomano en el Siglo XVIII.