El coronavirus no sólo ha provocado ya casi 800 muertos en España, sino que ha obligado a cambiar por completo uno de los momentos más duros para los familiares y allegados de quienes fallecen por cualquier causa. Los velatorios, funerales y entierros.
Aunque no hay evidencias de contagio a través de cadáveres, las empresas funerarias extreman las precauciones en el traslado de los mismos con equipos de protección para los trabajadores y bolsas especiales para los cuerpos. Y buena parte de ellas han cancelado los servicios de velatorio y aplazado los funerales. Algunas ofrecen la posibilidad de seguir el sepelio en directo a través de una retransmisión por internet.
Aunque el estado de alarma decretado por el Gobierno no prohíbe las celebraciones religiosas, sí impone restricciones para evitar grandes concentraciones de personas. De hecho deben tomarse medidas para que se respete la distancia mínima de un metro entre sus asistentes. Uno de los primeros grandes focos de contagio se registró en un funeral a comienzos de marzo en Vitoria, donde más de 60 asistentes resultaron infectados.
En Madrid, la Comunidad más afectada en España, el Ayuntamiento que dirige José Luis Martínez Almeida dio instrucciones a la Empresa Municipal de Servicios Funerarios y Cementerios para que no se celebren velatorios de personas que hayan fallecido por coronavirus o tuvieran síntomas asociados al mismo. El Gobierno regional de Isabel Díaz Ayuso también los ha prohibido después de que tres empresas funerarias tomasen la iniciativa (Interfunerarias, Parcesa y Nuestra Señora de los Remedios).
Grupos funerarios coma Áltima, han tratado de reducir al máximo el contacto de los familiares con los comerciales de la empresa catalana. "Sólo se permitirá un máximo de dos familiares durante la tramitación y se evitará en todo momento el contacto físico. Siempre que sea posible, se instará a realizar la tramitación por vía telefónica", señalan en la funeraria que limita la duración del velatorio a dos horas, en caso de que no sea un fallecimiento por Covid-19.
"Esta enfermedad es muy cruel"
"Hoy ha fallecido el padre de mi tío por coronavirus. No han podido despedirse sus nietos, sólo uno de sus hijos, con traje especial. No pueden ir al tanatorio. Los hermanos no pueden verse porque tienen síntomas. Podrán ir al entierro, sin compañía. Esta enfermedad es muy cruel", apuntaba el escritor Carlos Mayoral.
Hoy ha fallecido el padre de mi tío por coronavirus. No han podido despedirse sus nietos, sólo uno de sus hijos, con traje especial. No pueden ir al tanatorio. Los hermanos no pueden verse porque tienen síntomas. Podrán ir al entierro, sin compañía. Esta enfermedad es muy cruel.
— Carlos Mayoral (@Carlos__Mayoral) March 16, 2020
A falta de tanatorios donde intercambiar lágrimas y abrazos, los familiares y allegados de las primeras víctimas del coronavirus comparten a través de las redes sociales con sus testimonios. "Ayer falleció mi madre por coronavirus, ni mis hermanos ni yo hemos podido estar con ella ni despedirnos, no se puede ir al tanatorio. Sencillamente este virus ha hecho que desaparezca de nuestras vidas, ya no esta...que triste", dice Margarita Cabrera (Alcorcón, Madrid).