Es un enigma a día de hoy saber quién va a ser el sustituto del juez Eloy Velasco, magistrado del Juzgado Central de Instrucción Número 6 de la Audiencia Nacional, donde se instruyen algunas de las causas más importantes de corrupción que mantienen en jaque al Partido Popular (PP). El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha sacado ya dicha plaza a concurso pero, mientras se nombra al sustituto oficial de Velasco, corresponde la sustitución ordinaria a la titular del Juzgado Central de Instrucción Número 3 de la Audiencia, la magistrada Carmen Lamela.
Sin embargo, según informan fuentes jurídicas a Vozpópuli, Lamela ya ha comunicado al juez decano de la Audiencia, el magistrado Santiago Pedraz, la imposibilidad de hacerse cargo de los dos juzgados de forma simultánea debido a gran cantidad de asuntos complejos que se instruyen en los mismos -sólo el caso Púnica, o la operación Lezo son miles y miles de folios de sumario-.
Por esta razón, la magistrada pidió la semana pasada a Pedraz que solicitara a la Sala de Gobierno de la Audiencia que, mientras el Consejo nombra al sustituto de Eloy Velasco, dicha plaza se cubra mediante una "comisión de servicios". De ahí que el decano remitiese a dicha Sala un escrito donde explicaba que si Carmen Lamela se hace cargo de forma temporal de los asuntos del Juzgado Central de Instrucción Número 6 ello conllevaría "una sobrecarga de trabajo a esta magistrada en tanto no sea cubierta dicha plaza por el concurso que convoque el CGPJ".
Así las cosas, ahora será la Sala de Gobierno de la Audiencia el órgano encargado de hacer una propuesta concreta a la Comisión Permanente del Consejo una vez que haya barajado qué opción es la más idónea en este caso. Las distintas fuentes consultadas explican que la dificultad de nombrar una comisión de servicios para el JCI 6 -hasta que se nombre al nuevo juez- radica en que sería por muy poco espacio de tiempo, entre un mes y tres meses en el peor de los casos, por lo que habría que encontrar a alguien que estuviese dispuesto a aterrizar en la Audiencia Nacional para un espacio de tiempo tan breve. El nombre que más ha sonado para dicha comisión de servicios es el del magistrado Alejandro Abascal, hasta el pasado mes de diciembre juez de apoyo de Eloy Velasco y primer instructor del caso Lezo.
Varias posibilidades legales
Otra opción es la vía de sustitución interna, es decir, que dicha plaza sea cubierta por otro juzgado de la Audiencia Nacional con menos carga de trabajo que el de Lamela. En este caso la solución podría pasar por que hasta que se nombre al sucesor de Velasco se haga cargo del JCI 6 el magistrado del Juzgado Central Penal, en la actualidad el juez Ricardo Rodríguez.
De momento, se desconoce quién tomará definitivamente las riendas del citado juzgado, aunque los criterios que tendrá en cuenta la Comisión Permanente del CGPJ son exclusivamente la antigüedad de los candidatos. Otra opción es que el titular de la plaza, el magistrado Manuel García Castellón, actual juez de enlace en Italia, decida volver a la Audiencia Nacional; escenario que no descartan fuentes del órgano de gobierno de los jueces.
El pasado miércoles, por seis votos a favor y dos en contra, la Comisión Permanente adjudicó al juez Velasco una de las tres plazas de la nueva Sala de Apelaciones de la Audiencia. El magistrado fue nombrado atendiendo a su condición de especialista ya que superó "las pruebas selectivas de civil y penal se consideran especialistas a los efectos del artículo 330.7, párrafo segundo, de la Ley Orgánica del Poder Judicial". El instructor que más quebraderos de cabeza ha causado al PP en los últimos meses dejará de ser azote de la corrupción en España.