Uno de los clanes de carteristas más peligrosos del mundo ha desembarcado en España. Los miembros de esta familia rumana fueron detenidos hace años en París porque utilizaban a sus hijos, de entre 11 y 13 años, para robar a los turistas durante la celebración de eventos como la Eurocopa de 2016 o Roland Garros. Después de unos años de letargo, han vuelto a sus acciones criminales y primero se desplazaron a Madrid. De la capital fueron 'casi' expulsados por la presión de la 'Patrulla Madrid' y ahora se han trasladado a Sevilla, coincidiendo con la Feria de Abril, según informan a Vozpópuli fuentes de estos grupo que luchan contra los hurtos.
Este clan está dirigido por la matriarca Somna Bobocel. Una mujer que según las autoridades francesas fue detenida en junio de 2017 tras una ardua investigación en el país galo que contó con la colaboración de Rumanía, su país de origen. "Fue juzgada en Rumanía recientemente. No entendemos qué hace aquí", señalan a Vozpópuli desde la 'Patrullas Madrid' que han seguido sus últimos pasos.
El historial delictivo de este peligroso clan se remonta una década atrás. La investigación de los fiscales de la Dirección de Investigación de Crimen Organizado y Terrorismo (DIICOT) permitió detener en una macrooperación contra los carteristas a Aurel Gândac, Gheorghe Drugu, Spania Sănătescu, conocida como "Anglia", Marius Roman, Somna Bobocel y Norica Leonte.
La historia del peligroso clan rumano
Las seis detenidas, desde el año 2015, establecieron una red de hurtos en París coincidiendo con grandes eventos como la Eurocopa o Roland Garros. Para ello enviaron a la capital francesa a más de un centenar de niños, de entre 11 y 13 años, para robar a los turistas que acudían al país vecino. Las pesquisas esclarecieron que con estos actos delictivos se embolsaron más de 600.000 euros de los cuales más de 130.000 acabaron siendo transferidos a Rumanía.
Después de ello vinieron años de letargo. Su siguiente destino conocido fue Madrid. La Patrulla Madrid consiguió identificar en la capital a Somna Bobocel acompañada de varios miembros de su familia por los lugares más emblemáticos de la capital como la zona de Ópera o la Puerta del Sol.
Los últimos pasos de esta familia les ubican en Sevilla a mediados de marzo. Han sido grabadas en zonas como la Avenida de la Constitución, donde se dieron avisos de hurtos por la presencia de carteristas. "Es increíble la impunidad de estos clanes", resaltan desde la agrupación de ciudadanos que persiguen estos delitos.
El 'terror' de los carteristas de Sevilla
Una de sus reclamaciones fundamentales es que se modifique la legislación y se actúe con más dureza contra estas familias del crimen. El hombre que ha conseguido ubicar al clan de Bobocel es Francisco, un agente judicial jubilado de 66 años. Se ha convertido en el 'terror' de los carteristas de Sevilla.
Su particular lucha comenzó hace un año cuando Francisco desayunaba en la Avenida de la Constitución, junto a la Catedral y fue testigo del robo a una turista alemana. Siguió a la sospechosa y terminó reteniendo a ella y a varias compinches en una calle cercana. Era el clan de las bosnias, que el mismo desmanteló tras avisar a la policía. Desde entonces, comenzó a perseguir carteristas por el centro de Sevilla y se abrió una cuenta en Instagram, en la que cuelga a diario vídeos de delincuentes a los que sorprende robando.
Algunos de sus videos se han hecho virales, su cuenta de Instagram que se llama huevosfritosconpatatas, ha alcanzado más de 20.000 seguidores. Su grito de alerta a los turistas ("Pickpocket", carterista en inglés) es fácilmente reconocible por las potenciales víctimas. Colabora con la Policía Nacional y con la Policía Local, a la que ofrece información fiable de estas redes criminales y a las que en numerosas ocasiones ha servido en bandeja las detenciones a los sospechosos. Según apuntan fuentes del Ayuntamiento de Sevilla, la labor de este exagente jubilado está siendo un alivio para los agentes, ya que asegura que han descendido notablemente los robos a turistas en el centro, y eso se nota sobre todo en las denuncias de los ciudadanos.
Norne Gaest
La impunidad de los delincuentes carteristas es una consecuencia más del DOMINIO CULTURAL PROGRESISTA. La leyes y el sistema penal está en función de los delincuentes, no de los ciudadanos y las víctimas. Así sigan Vdes. (los que lo hagan) votando izqdas. o centro derecha centrado. moderada, que tales leyes seguirán intactas.
Leo
Pregunta: ¿Si ya los han fichado por que no los detienen?
Ansurez
Yo creía que venían a pagar nuestras pensiones
Ottos
Somos el país de la mafia internacional, somos el proveedor de narcóticos de Lisboa a Moscú. La Cocoa pasa a Marruecos, buen talante Zapatero, y después por el estrecho a Europa.
giledu
España es una broma de mal gusto. Esta clase política se ha encargado de destrozar un país. Y lo sigue haciendo. Aquí se instala toda la bazofia delincuencial con total impunidad y tranquilidad. Con nuestros impuestos se les cura, se les mantiene en la cárcel, y con la idiocia inculcada en unos ciudadanos borregos hasta la médula, si estás en contra eres de la "fachosfera". Mejor estar preparado para volar a otro país en cualquier momento.
rayMaN
Nosotros, los rumanos, llamamos a estos especímenes, gitanos, asi de simple. Sin ser llamado facha ni nada de eso, es más para ellos es un orgullo ser llamado gitano. Que sí, que vienen de esa parte de Europa... Es como si los moros nacionalizados aqui, se van a fuera y les llaman españoles y tienen toda la razón, han estado de ocupación cientos de años. En cambio estos "rumanos" llevan solo 150 años y poca mezcla se hizo, el Ceausescu se encargo de separarnos bastante bien. El problema es que se han multiplicado, y aún lo hacen, de manera exponencial.