La Coordinadora de la España Vaciada ha llamado a concentrarse el 3 de octubre cinco minutos frente a los consultorios y centros de salud para exigir "una sanidad pública de calidad en el medio rural con las mismas coberturas y prestaciones" que en las zonas urbanas, y que atienda sus especificidades.
Así lo ha trasladado este miércoles en un comunicado COCEDER, la confederación de centros de desarrollo rural, que apoya la movilización junto a los colectivos de la España Vaciada con la reivindicación, además, de "un cambio de modelo en la sanidad pública" para garantizar la igualdad de acceso al derecho básico a la salud.
Por ello, exigen que se mantengan abiertos y activos los consultorios locales, proponen crear la figura del sanitario rural y un programa básico de salud pública en las zonas rurales fundamentado en la prevención; y reivindican dotar de la plantilla necesaria para atender una población dispersa y envejecida a los centros de salud comarcales.
Asimismo, piden "el cumplimiento de la Ley General de Sanidad, dotando a todas las áreas de salud de un equipo multidisciplinar y que se convoquen con regularidad los Consejos de Salud comarcales y reivindica una cobertura informática adecuada".
Ante esta nueva movilización, la España Vaciada insta a que los ayuntamientos, asociaciones y colectivos sociales muestren su apoyo por escrito al documento "Por un Modelo Socio-sanitario de Salud en el Mundo Rural" que debe asentarse en cuatro pilares fundamentales: las personas en primer lugar, los profesionales de la salud, las estructuras sociocomunitarias y el territorio.
A su juicio, la pandemia de la covid ha evidenciado "las carencias y limitaciones del sistema sanitario, agudizadas aún más en el mundo rural por la escasez de profesionales y la falta de planificación, donde todavía no se ha restablecido el servicio de atención primaria en los pueblos y corre el riesgo de un progresivo desmantelamiento".
"En las semanas más críticas de la pandemia, en los territorios rurales se suspendió la atención presencial en los consultorios locales y la atención a los vecinos se limitó a las consultas telefónicas, la tramitación de las recetas (en muchos casos con la colaboración vecinal y comunitaria), las urgencias y algunos cuidados ineludibles a los enfermos crónicos concertados con citación previa", han denunciado.
Ahora, "esa situación excepcional y provisional se ha prolongado en el tiempo de manera injustificada y, después de casi tres meses, la Atención Primaria continúa confinada en los centros de salud y la población de los núcleos locales, constituida mayoritariamente por mayores", han referido.
Por ello han revindicado como esencial la figura del médico de familia y piden que se haga más atractiva el desarrollo de la carrera profesional de los médicos en los pueblos.