Los nueve empresarios acusados en el juicio de la trama Gürtel contra la excúpula del PP valenciano han confesado este martes, en virtud a un acuerdo con la Fiscalía para evitar la cárcel, que pagaron algo más de 1,2 millones de euros para financiar ilegalmente al PP en las campañas electorales de 2007 y 2008. Los nueve empresarios han reconocido todos los hechos de los que le acusa la Fiscalía Anticorrupción.
En concreto, el presunto líder de la trama, Francisco Correa, ha asegurado que el exsecretario general del PP valenciano Ricardo Costa obligó a sus sociedades a facturar irregularmente trabajos de las campañas electorales de 2007 y 2008 a otras empresas si querían cobrar.
"El PP tuvo la iniciativa: 'Si queréis cobrar tenéis que hacerlo de estos empresarios'. Imagino que a ellos también les dirían que si no lo hacían así tendrían menos adjudicaciones de obra", ha dicho Correa durante su declaración como acusado en el juicio a la trama valenciana de Gürtel que desde este lunes.
Concretamente ha apuntado a Ricardo Costa, acusado en el juicio, como el que dio la orden a su segundo, Pablo Crespo, de facturar a otros empresarios servicios que la filial de Gürtel en Valencia, Orange Market, habían prestado al PP.
"Ese trabajo por el que hemos emitido esas facturas no era para ellos (los empresarios) sino para el Partido Popular. Como ellos no nos pagaban nos dijeron: 'facturádselo a estos empresarios'", ha explicado Correa.