El todavía senador y diputado autonómico del PP Francisco Granados ha dicho este jueves que nadie en su partido le ha pedido que dimita de sus cargos, pero que ha decidido abandonar la política porque se siente víctima de un "linchamiento" que le ha sorprendido por su "virulencia".
Granados ha hecho estas declaraciones en 13TV, donde ha expresado su convencimiento de que la actual presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, le sacó del Gobierno regional, cuando estaba ella al frente, no porque hubiera perdido la confianza en él, sino porque estaba pensando en su propia sucesión, para la que él suponía un "estorbo".
En este sentido, ha apuntado que Aguirre tomó esa decisión porque su presencia perjudicaba a su sucesor, Ignacio González, ya que, ha declarado tajantemente, cree que es él quien tiene más apoyos en el PP de Madrid. "Yo soy un estorbo porque quien tiene el apoyo de la militancia (en el PP de Madrid) soy yo", ha remarcado Granados.
El que fuera secretario general del PP madrileño ha confirmado también que, a pesar de su renuncia como senador y diputado autonómico, seguirá siendo militante del PP porque es "el hoolingan más aguerrido". "Estoy siendo sometido a un linchamiento", ha comentado Granados antes de apuntar, no obstante, que no siente que su partido le haya dado la espalda.
Preguntado sobre la procedencia del dinero de Suiza, ha dicho que "lo importante no es dónde está el dinero sino de dónde proviene" y que está "absolutamente limpio", ha subrayado. Según Granados, el dinero de su cuenta procedía "de la actividad privada", que "no es delito", y ha asegurado que esos fondos estaban declarados.
Sobre cuál sería su candidato preferido para las próximas elecciones autonómicas y locales, ha dicho que el mejor es el que gana las elecciones, y que si Aguirre se presentara, ganaría.
No obstante, ha evitado pronunciarse sobre si Ana Botella, actual alcaldesa de Madrid, sería mejor candidata que Aguirre para ese puesto, por "respeto" y porque todavía queda un año y medio para los comicios autonómicos y locales. En cuanto al distanciamiento mantenido en los últimos dos años con la presidenta de su partido en Madrid, ha dicho que es "evidente", porque han discrepado en "muchísimas cosas" en este tiempo.
Granados se convierte así en otro miembro de los gobiernos de Aguirre con depósitos bancarios en el paraíso fiscal helvético, al igual que Alberto López Viejo, exconsejero de Deportes y al que Hacienda le devolvió en su declaración de la renta a pesar de su ingente patrimonio. López Viejo acumuló 'mordidas' de todo tipo relacionadas con la trama Gürtel.