El Ministerio del Interior ha ordenado reforzar el nivel de alerta antiterrorista esta semana con motivo de las elecciones autonómicas, locales y europeas, según un oficio de la Secretaría de Estado de Seguridad al que ha tenido acceso Vozpópuli. El Departamento que dirige Fernando Grande Marlaska mantiene el Nivel 4 de alerta (de un máximo de 5), pero se reforzarán puntos estratégicos por riesgo de acciones terroristas.
“La celebración el próximo día 26 de mayo de las elecciones al Parlamento europeo, municipales y autonómicas, unido todo ello a la persistencia actual de altos niveles de riesgo de actuaciones terroristas hacen preciso no solo mantener las medidas de prevención, protección y respuesta previstas en el vigente Nivel 4 de Activación del Plan de Prevención y Protección Antiterrorista, sino también proceder a un reforzamiento de especial intensidad de las mismas”, dice el escrito.
Esta decisión parte de las conclusiones de una reunión extraordinaria sobre la valoración de la amenaza celebrada el pasado 17 de mayo. A esos encuentros asisten los expertos de Información de la Policía Nacional y la Guardia Civil. No es la primera vez que desde Interior se adopta esta medida antes de unas elecciones. Los trabajos se centran en vigilar especialmente centros de votación, lugares de aglomeración de personas, centros comerciales, espacios y medios de transporte…
Hasta el lunes
La orden dictada por la 'número dos' de Interior, Ana María Botella, es que se intensifiquen los controles desde este miércoles hasta la 14 horas del lunes. Las fuerzas de seguridad ampliarán los controles aleatorios de personas y vehículos o en acontecimientos deportivos como el que enfrentará el sábado en Sevilla al Barcelona y el Valencia por la final de la Copa del Rey. También se vigilará especialmente los “edificios emblemáticos” o que puedan ser identificados “como de especial interés por los elementos terroristas para sus acciones”.
A la hora de reforzar el control policial sobre espacios de transporte, el escrito se refiere también a aeropuertos y puertos. Al mismo tiempo, pide a los agentes de las fuerzas de seguridad que tengan en cuenta las recomendaciones de una instrucción anterior en la que “se imparten recomendaciones en materia de autoprotección y criterios de actuación ante comisión de atentados terroristas”.
España mantiene desde hace años el Nivel 4 de alerta antiterrorista, que significa un riesgo alto de atentado. Nunca ha recurrido a activar el Nivel 5, que implica riesgo de atentado inminente y para el que ya entra en juego la participación de las Fuerzas Armadas. Los expertos en la valoración de la amenaza terrorista no ocultan que el mantenimiento durante un largo periodo de tiempo de niveles de alerta altos es contraproducente porque pierden su sentido al convertirse en una rutina.
Preocupación por los retornados
En la actualidad, la principal preocupación de las fuerzas de seguridad son los radicales retornados luego de años enrolados en grupos yihadistas en zonas de conflicto. Según los cálculos de Interior, de España salieron cerca de 230 atraídos por los mensajes radicales de la propaganda terrorista. El temo es que regresen con intención de atentar en sus países de origen, sobre todo después de la derrota de Estado Islámico en su autoproclamado califato ubicado entre Siria e Irak.
Esa derrota militar no ha impedido que su líder Abu Bakar Al Baghdadi reapareciese años después para mandar un mensaje a sus seguidores, reivindicar sus diversas sucursales repartidas por todo el mundo e insistir en los llamamientos atentar.
