El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, comenzó su comparecencia ante el Congreso apelando a la "amistad" que debe prevalecer entre España y el Reino Unido, aunque ha calificado de "incendio importante" el último contencioso abierto con este país a cuenta de Gibraltar. García-Margallo ha pronunciado estas palabras al inicio de su comparecencia en la Comisión de Exteriores del Congreso de los Diputados para informar sobre el conflicto con el Reino Unido a raíz de las últimas acciones desarrolladas por las autoridades de Gibraltar y los controles en la Verja porque "Gibraltar ha sido, es y será, una prioridad nacional", ha dicho.
Pero el ministro no ha tenido reparos a la hora de hablar de fiscalidad y ha criticado tanto el tráfico ilegal, que según apuntó Margallo creció un 213% entre los años 2010 y 2012, como las sociedades fantasma propietarias de bienes (3.000) o la tributación del negocio del juego, que mueve 113.000 millones de euros al año, el 20% del PIB de la colonia británica. "Queremos una evaluación de régimen fiscal completa de Gibraltar", aseveró. La colonia británica tiene un modelo económico "basado en la desregulación, la opacidad y la baja tributación", denunció.
El ministro sugirió que el endurecimiento de los controles de la Guardia Civil en la Verja continuará para combartir el contrabando. En este sentido, Margallo aseguró que de no recurrir a esta medida, el tráfico de tabaco habría superado a final de año la cifra de 200 millones de cajetillas (se computaron 93 millones en los primeros seis meses de 2013). De este tránsito, el Ministerio del Interior informó también ayer que se habían incautado casi 700.000 cajetillas no declaradas entre enero y agosto.
Siempre con el apoyo de las Cortes
Margallo reconoció además que "no es este el momento de hablar de soberanía", sin embargo, ha dejado la puerta abierta a negociaciones privadas en el Congreso para avanzar en este asunto. Por su parte, Reino Unido se niega a hablar de soberanía. En palabras del ministro Margallo, éste es un tema que llegado el momento requerirá "conversaciones a nivel de confidencialidad" y no "con luz y taquígrafos". El titular de Exteriores ha apuntado que no se tomará "ninguna decisión" en materia de soberanía "si no es previa deliberación y acuerdo" con las Cortes, recurriendo a las tres posibles vías: el Tribunal de La Haya, el de Derechos del Mar y un tribunal formado ad hoc para ello.
Entretanto, y al margen de la cuestión de soberanía, el titular de Exteriores manifestó que el Ejecutivo de Mariano Rajoy está dispuesto a "explorar" con el Reino Unido la constitución de grupos ad hoc para abordar los problemas concretos y subrayó que en asuntos como la pesca y el medio ambiente, España es partidaria de que participen tanto Gibraltar como la Junta de Andalucía, en un debate a cuatro.
Aunque ha insistido en que el Gobierno español no reconoce a Gibraltar derecho a legislar sobre unas aguas cuya soberanía reclama la colonia y España no reconoce, García-Margallo ha anunciado como "buenas noticias" la información que le ha llegado este martes desde el Peñón, en relación a dicha posible modificación de la ley gibraltareña de protección de la naturaleza, especialmente si va a redundar "en beneficio de los pescadores".
"Moratinos tuvo buena voluntad, pero se equivocó"
El ministro ha calificado de "error infinito" el Foro Tripartito que puso en marcha durante el Gobierno socialista el entonces titular de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, a la vez que ha considerado que Gibraltar "aprovecha cualquier ocasión para ganar cuotas de estatus de país soberano. Margallo lamentó que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, a partir de dicho foro y su Declaración de Córdoba, reconociese a Gibraltar una posición similar a Reino Unido y España en las conversaciones sobre el Peñón, posibilitando que la colonia avanzase hacia la autodeterminación.