El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha garantizado este miércoles que si los expresidentes de la Junta de Andalucía Manuel Chaves y José Antonio Griñán son finalmente imputados por algún delito en la causa de los ERE cumplirá "su palabra" y se les pedirá que abandonen sus escaños. "Desde luego voy a cumplir con mi palabra cuando se produzca esa imputación con delito, si es que se produce, el PSOE actuará y por lo tanto cumpliré con mi palabra", ha prometido Sánchez en los pasillos del Congreso.
El líder del PSOE asegura que no ha habido ningún cambio de criterio en el partido a la hora de exigir responsabilidades políticas por casos de corrupción. Y ello a pesar de que tanto el PSOE como la Junta de Andalucía rechazaron este martes pedir la renuncia de los cinco parlamentarios socialistas citados por el Supremo en la causa de los ERE, a pesar de que en pronunciamientos previos habían prometido que la imputación conllevaría la salida de las Cámaras. "Cualquier persona que resulte imputada, cualquiera, va a tener que dejar su escaño, pero dejen que sea la justicia la que hable", había dicho Susana Díaz el pasado mes de noviembre.
Tanto Sánchez como Díaz se muestran ahora partidarios de no pedir responsabilidades políticas a los expresidentes andaluces hasta que no se les atribuya un delito.
Citados después de las andaluzas
El PSOE permitirá a Chaves y Griñán mantener sus escaños en el Congreso y en el Senado, respectivamente, mientras el juez del Tribunal Supremo que investiga el caso de los ERE no les impute un delito. Los dos expresidentes andaluces y los otros tres aforados implicados en la causa del presunto fraude, los diputados José Antonio Viera y Gaspar Zarrías y la senadora Mar Moreno, han sido citados a declarar como imputados en el Supremo, después de pedirlo voluntariamente, entre el 7 y el 21 de abril, sin que pese sobre ellos por ahora ninguna acusación concreta.
