El Ministerio del Interior va a movilizar a 90.000 agentes a partir del próximo viernes para garantizar la seguridad de la campaña electoral y los comicios del 26-J. El dispositivo prevé la participación de 44.000 agentes de la Guardia Civil y 30.000 del Cuerpo Nacional de Policía, que contarán con la colaboración de 12.000 policías locales y 4.000 agentes de las distintas policías autonómicas, según han informado a este diario fuentes del departamento. Un enorme despliegue de seguridad que se mantendrá operativo hasta el día siguiente a los comicios.
El Director Adjunto Operativo (DAO) de la Policía, Eugenio Pino, remitió el pasado día 2 una circular a los servicios centrales y a las jefaturas superiores del Cuerpo con instrucciones precisas para garantizar el libre ejercicio del derecho al voto y el mantenimiento de la seguridad ciudadana en los comicios del próximo día 26, al que ha tenido acceso Vozpópuli. El dispositivo prevé una fase previa a partir de las cero horas del próximo viernes, día 10, coincidiendo con el inicio de la campaña electoral, que se prolongará hasta las 24 horas del día 23, y una fase operativa desde ese momento, coincidiendo con el inicio del último día de la campaña electoral, hasta las 9 horas del día 27. La circular recuerda que está vigente el nivel 4 de activación del Plan de Prevención y Protección Antiterrorista. Dicho nivel permanece activado desde hace ahora un año, tras los ataques yihadistas perpetrados en Francia, Túnez, Kuwait y Somalia.
En la fase previa la Policía incrementará las medidas de prevención e información para detectar cualquier acción que pretenda perturbar el normal desarrollo de los comicios. También se incrementará la vigilancia y protección de los lugares de alta concentración de personas, especialmente las referidas a los transportes terrestres, aéreos y marítimos, las zonas y los edificios emblemáticos, y las infraestructuras estratégicas para el normal funcionamiento de la actividad ciudadana. Además, agentes de policía protegerán aquellos actos organizados por las distintas fuerzas políticas y se procederá a una más exhaustiva protección de las sedes de los partidos.
El dispositivo prevé un seguimiento de las redes sociales para detectar cualquier iniciativa encaminada a alterar el normal desarrollo de los comicios
La fase operativa supone un refuerzo de las medidas desplegadas en la fase anterior, intensificándose prioritariamente la vigilancia y protección de las infraestructuras críticas y aquellas otras que presten servicios esenciales, además de hacer un seguimiento de las redes sociales con el fin de detectar cualquier iniciativa encaminada a alterar el normal desarrollo de los comicios. También se activará la protección de los colegios electorales y sus inmediaciones durante la jornada electoral mediante dispositivos de seguridad fijos o móviles. En concreto, está previsto que cada colegio electoral cuente con la presencia de un máximo de tres agentes de policía. Las policías autonómicas y locales colaborarán en el marco de sus competencias y de acuerdo con lo que se establezcan en las respectivas juntas de seguridad, estableciéndose mecanismos de coordinación tanto con estos cuerpos como con los servicios de seguridad privada y los servicios de emergencia sanitaria.
El DAO se reunió la semana pasada con los representantes de los sindicatos de Policía para trasladarles las directrices del plan de seguridad y acordar la remuneración de los agentes que participen en la misma, que ha quedado fijada en 144,84 euros y un día libre para todos aquellos de servicio que no utilicen el tiempo de que disponen durante su jornada de trabajo para ejercer el derecho al voto (se recomienda que voten por correo). Se trata de una cantidad incrementada en un 1% en relación con los comicios del pasado 20-D (143,42), que algunos sindicatos consideran insuficiente dado que esta cantidad se mantenía sin modificaciones desde 2011.