Gregoria Sánchez, madre del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha muerto durante la madrugada de este lunes en Toledo.
Tenía 89 años de edad y el pasado 22 de agosto fue trasladada al Hospital Virgen del Valle de la capital regional tras confirmarse su positivo en coronavirus.
Se trataba de una paciente con patologías previas graves que superó la enfermedad y tras varias semanas ingresada fue traslada de nuevo a su domicilio. Dada su avanzada edad no ha podido superar finalmente su delicado estado de salud.