La Unión Europea ha metido mano en Mercadona, Carrefour, Lidl, Aldi, Alcampo... La entidad ha comenzado un proceso exhaustivo para reducir el impacto de los residuos en el medioambiente, teniendo en el punto de mira a los supermercados de todo su territorio. Es por ello, que la UE ha confeccionado una serie de normativas que se deberán llevar a rajatabla y que se seguirán periódicamente para chequear que las diferentes cadenas siguen las directrices impuestas.
La realidad es que Mercadona, Lidl y Carrefour son los supermercados líderes a nivel nacional. La calidad de sus productos, que no tiene nada que envidiar a los de alta gama, sus precios tan asequibles y la accesibilidad que tienen sus establecimientos, son algunos de los secretos del éxito de los supermercados frente a los negocios de toda la vida. Y es que estas multinacionales apostaron hace más de dos décadas por una fórmula que hasta el momento nadie había explotado dentro de España: el low-cost.
Un modelo de negocio que, visto lo visto, les ha salido redondo, hasta el punto de conquistar todo el gremio, dejando en un segundo plano a las fruterías, carnicerías y mercados. Parte fundamental del éxito radica en que Mercadona, Lidl y Carrefour tienen en sus estantes la mayoría de alimentos que las familias necesitan para abastecer sus despensas y neveras, lo que facilita el trabajo y ahorra horas de ida y vuelta a los diversos negocios locales del barrio. Aunque hay que recalcar que, evidentemente, la calidad de sus productos es inferior, pero se compensa con la comodidad y sus precios.
La pregunta que muchos se hacen es: ¿Qué controles de calidad tienen que pasar los productos que se venden en los supermercados nacionales? Pues en primer lugar, todos los alimentos son evaluados bajo las normativas que se imponen desde el Gobierno, que al mismo tiempo está tutelado por la Unión Europea. En esencia, la institución es la responsable última de tener un control exhaustivo tanto de los aditivos que se utilizan, como de los envases para evitar el uso excesivo del plástico.
Prueba de ello es una de las últimas medidas que se ha establecido durante de los últimos meses en algunos envases. Tal y como ha explicado Mercadona a través de Twitter, esta medida ha venido de la mano de la Unión Europea y que de cara al 2024 se pretende implantar en todos los envases que se vendan en los supermercados. A continuación, os contamos cuál es la nueva normativa de la Unión Europea que afectará a varios productos de los supermercados.
La nueva normativa de la Unión Europea que ha impuesto a Mercadona, Carrefour, Lidl...
El usuario de Twitter @elcamionerogeek publicó este 30 de noviembre un tuit en el que preguntaba a Mercadona lo siguiente: "@mercadona ¿Por qué pusisteis los tapones así? Molestan un montón". El mensaje iba acompañada de una imagen de un tetabrick de leche de Hacendado en el que se ve claramente como el tapón no se puede separar del envase.
El objetivo es que permanezcan unidos al envase cuando lo depositemos en el contenedor amarillo. De esta forma se facilita que el tapón pueda ser reciclado junto con el resto de envases, mientras que ahora son muchos los que se pierden por el camino ?. Saludos. (2/2)
— Mercadona (@Mercadona) November 30, 2023
Ante la pregunta del cliente, Mercadona ha aclarado la duda del internauta explicando que se debe a una normativa impuesta por la Unión Europea: "Hola. Indicarte que, hasta julio’24, se van a sustituir progresivamente los tapones actuales por tapones que no se puedan separar del envase. Este cambio se va a efectuar en todos los envases de bebida del mercado con tapón de plástico, debido a una Normativa Europea. El objetivo es que permanezcan unidos al envase cuando lo depositemos en el contenedor amarillo. De esta forma se facilita que el tapón pueda ser reciclado junto con el resto de envases, mientras que ahora son muchos los que se pierden por el camino. Saludos".
Gala
Si nos gobieernan aquí unos chorras y en Bruselas igual o más chorras, llegamos a la conclusión de saber porque derramamos parte de la leche al abrir los tetrabriks. Hasta donde llegan los tontos del haba y vacíos de contenido bruselenses al fijarse en los taponcitos que se pierden (alguno que lleva comisión, seguro) y no reparan en el lío tipo cacharrería que tienen montado los ALDIS y LIDELS donde te venden zapatos, rotuladores y bragas al lado de la carne o el pescado. En fin, esto no se veía en España desde la posguerra cuando los aldis se llamaban tiendas de ultramarinos. Yo de seguir perdiendo leche de los bricks pediré una indemnización o una rebaja en el precio. Aqui de lo que se trata es de no perder el mando social porque entre unos tontos y otros nos menguan la salud con tanta orden estúpida. Ya se sabe: "éramos pocos y parió la abuela".