La sentencia de 'La Manada' continúa dando de qué hablar. La última opinión hecha pública dista mucho de las protestas contra la sentencia emitida por la Audiencia de Navarra por considerar un delito de abuso y no de violación. También se aleja de la de los propios magistrados. El programa de Cuatro 'En el punto de mira' dedicó el espacio de este lunes a hablar de las violaciones en grupo y contó con el testimonio del padre de José Ángel Prenda, uno de los condenados a nueve años de prisión por abusos sexuales a una joven de 18 años en Sanfermines.
Tras asegurar que su hijo es "un buen chico" que cuida tanto de su madre como de él, el padre del condenado señaló que "el tropiezo no lo tuvo él, él y los cinco amigos, lo tuvo ella. Ella es la culpable". "Confío en ellos no en la niña", afirmó tajante. No obstante, la crudeza de las palabras del entrevistado se plasmó cuando no dudó en aseverar que "los niños [los cinco miembros de 'La Manada'] son muy chulos, fue ella la que fue a buscarles, que los sevillanos eran muy guapos, podía con 5 y con 25 sevillanos".
El sevillano concluyó la conversación afirmando que espera que "se haga justicia". El padre de 'El Prenda' lamentó que hace “dos años y medio que no ve” a su hijo aunque sabe que está bien por los familiares que lo visitan.
La Audiencia de Navarra condenó a cada uno de los cinco jóvenes conocidos como 'La Manada' a 9 años de cárcel por un delito continuado de abuso sexual con prevalimiento y no por agresión sexual
El espacio de Mediaset analizó 'las otras manadas' y mostró la sucesión de agresiones y abusos sexuales en grupo que se han producido por toda España en un periodo corto de tiempo. Casos similares en Plasencia, Aranda de Duero, Vejer, Mogán (Canarias), Alicante o Sevilla se suman al más conocido, el de 'La Manada'.
Nueve años de prisión
La Audiencia de Navarra condenó a cada uno de los cinco jóvenes conocidos como 'La Manada' a 9 años de cárcel por un delito continuado de abuso sexual con prevalimiento y no por agresión sexual, al no apreciar violencia, contra la joven en Pamplona durante los Sanfermines de 2016.
La sentencia rebajó el delito penal solicitado al descartar el empleo por parte de los acusados de "violencia o intimidación que integran el concepto normativo de agresión", y sí ver el subtipo agravado en el delito de abuso sexual.