En los últimos meses el Partido Nacionalista Vasco (PNV) mantenía una postura crítica pero tibia respecto a la Corona. Pero en los peneuvistas acaban de endurecer sobremanera su discurso contra Felipe VI hasta el punto de que el lehendakari, Íñigo Urkullu, esgrimía este viernes la teoría de "republicanizar" la monarquía y abogaba por una consulta a los ciudadanos sobre el futuro del Rey.
Tanto el propio Urkullu y como el portavoz jeltzale en el Congreso de los Diputados, Aitor Esteban, utilizan un tono más calmado en general. Y, por ello, en los últimos años han sido menos combativos con la corona en particular. Parecían lejanos aquellos tiempos de Iñaki Anasagasti arremetiendo día sí y día también contra la monarquía. Hasta ahora.
Este viernes en el Parlamento vasco Urkullu sorprendía al respetable al afirmar que es hora de "republicanizar la monarquía". Con ello se refería a que la Jefatura del Estado debe ser sometida a "ratificación por periodos generacionales", según apostillaban después fuentes del Ejecutivo vasco. En una respuesta a Amaia Martínez, única representante de Vox en la Cámara, Urkullu afirmaba que en un sistema democrático "nadie esté por encima de las leyes que afectan al resto de ciudadanos".
Discurso en el Congreso
Las palabras del lehendakari no eran casualidad. Estaban preparadas. Y, de hecho, no tuvo tiempo de decir todo lo que pretendía. El plan era mandar un mensaje nítido sobre la monarquía a raíz de las últimas polémicas. Sólo veinticuatro horas antes Esteban aprovechaba el pleno del Congreso para denunciar el "clamoroso silencio" de Felipe VI respecto a la polémica sobre su ausencia en Barcelona decidida por el Gobierno. Un silencio que, al decir del portavoz del PNV, alimentaba la "crispación institucional".
El tono de Esteban iba en la línea de las manifestaciones de los portavoces de Unidas Podemos y del conjunto de formaciones nacionalistas que ese mismo día se escucharon en el Parlamento. O, dicho de otra manera, el PNV se sumaba al frente de quienes más están cuestionando a la Jefatura del Estado.
En esta última semana los diferentes portavoces peneuvistas, incluido su presidente, Andoni Ortuzar, habían sido precavidos a la hora de valorar la ya célebre ausencia del Rey en el acto judicial de Barcelona. Pero la estrategia ha cambiado.
Las claves del cambio
Es obvio que el PNV ha decidido profundizar en sus críticas al jefe del Estado. Al decir de las fuentes consultadas, en esta nueva postura de los peneuvistas tiene bastante que ver la posición de EH Bildu. Los jeltzales pisan el acelerador contra la Corona para que los bildutarras no les coman terreno en el electorado nacionalista, donde Felipe VI no está entre los personajes preferidos.
Tal y como informaba El Correo este mismo viernes, esa apelación a "republicanizar la monarquía" es un concepto esgrimido habitualmente por el filósofo Daniel Inerárity, que el pasado septiembre explicaba en un artículo de La Vanguardia que "el principio de autoridad por herencia familiar" debería ser sustituido por "la libre decisión popular a la hora de determinar quién y de qué modo ejerce cualquier autoridad política".
