Un grupo de policías nacionales y guardias civiles ha montado un escrache a las puertas de la casa de Pablo Iglesias e Irene Montero, en el municipio madrileño de Galapagar, en protesta por el freno del Gobierno a la iniciativa de equiparación salarial entre diferentes cuerpos policiales.
"A igual trabajo, igual sueldo", es el eslogan que los agentes han esgrimido frente a la casa del vicepresidente segundo del Gobierno y de la ministra de Igualdad. Poco después, los guardias civiles que protegen la vivienda de Iglesias y Montero han identificado a los manifestantes.
El pasado martes, el PSOE anunció su voto negativo a la iniciativa legislativa popular (ILP) presentada por la asociación Jusapol, que integra a guardias civiles y policías nacionales. Dicha iniciativa planteaba que sus sueldos quedasen ligados al de otros cuerpos autonómicos, principalmente el de los Mossos d'Esquadra. Cientos de agentes protestaron a las puertas del Congreso por la decisión del Gobierno.
Los argumentos del Gobierno
El Gobierno argumentó una serie de cuestiones técnicas para rechazar esta iniciativa pese a que previamente el PSOE se posicionase a favor. Por un lado, que ya hay un acuerdo de equiparación salarial en marcha -que desde Jusapol consideran insuficiente e irreal-.
Por otro, que no se pueden comprometer a vincular los salarios entre diferentes cuerpos policiales, habida cuenta que cada autonomía tiene las competencias de regular el sueldo de sus funcionarios. Y que el Govern catalán -en el caso de los Mossos- puede subir el salario de los mossos hasta niveles que Moncloa no podría asumir.
El movimiento Jusapol rechaza la idea de que no haya presupuestos suficientes para alcanzar un acuerdo salarial en estos términos. "Riegan Cataluña con millones de euros, más aún tras los pactos de Gobierno con partidos independentistas, y luego nos dicen a nosotros que no hay dinero", detallan en conversación con Vozpópuli.
