El cabeza de lista de la CUP, Carles Riera, ha afirmado hoy que a su partido le consta que los "servicios de inteligencia" preveían "la posibilidad de, incluso con la colaboración de grupos de extrema derecha, generar conflictos violentos y acusar a la CUP" como "responsable".
"Uno de los escenarios" contemplados por el Estado en caso de que se hubiera hecha efectiva la proclamación de la república catalana era "facilitar" que se dieran "fenómenos de violencia" y culpar de ellos "a la izquierda independentista", ha asegurado.
Riera, que se ha expresado así en rueda de prensa en la presentación de los candidatos de la CUP para las elecciones del 21 de diciembre, ha dicho que su partido "hace meses" que tiene "constancia" de esta posibilidad.
Esto es algo que "no es nuevo" en los Estados "autoritarios y despóticos", ha criticado.
Riera no ha querido sin embargo hacer públicas "las fuentes" que asegura que les habrían facilitado esta información.
El cabeza de lista de la CUP para el 21D ha contestado así al ser preguntado por las palabras de ayer de la secretaria general de ERC, Marta Rovira, que dijo que el Gobierno "amenazó" por "múltiples vías" con enviar al Ejército y con "muertos en las calles" si el Govern mantenía sus planes de la declaración unilateral de independencia (DUI), un escenario de "violencia extrema" que "no estábamos dispuestos a asumir".
El portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, calificó ayer estas afirmaciones de "burda patraña" y afirmó que "los dirigentes secesionistas están acostumbrados a mentir".
También el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, dijo que las afirmaciones de Rovira son "una vergüenza. Ya no hay calificativo que tenga para aplicar a esa afirmación. Dejémoslo en que es absolutamente falso. Es una enorme mentira y, sobre todo, es una vergüenza".