No va a "aceptar" otra sentencia por parte del Tribunal Supremo que "no sea la libre absolución" de los encausados. Así lo ha asegurado el presidente de la Generalitat, Quim Torra, en una entrevista con la agencia EFE, a la vez que ha exigido a la Fiscalía que pida la absolución y admita que el caso del denominado 'procés' es un "montaje".
El líder catalán ha subrayado que no usará a los dirigentes soberanistas presos como "moneda de cambio" en una negociación con el Gobierno de Pedro Sánchez. Se ha mostrado cauto de cara a la negociación de los próximos presupuestos generales del Estado y no ha querido avanzar cuál será la posición de los diputados independentistas en el Congreso: "Ahora no es el tema", ha dicho.
Antes vendrán, ha destacado el presidente catalán, unas "semanas decisivas" en Cataluña: "Este mes de octubre para mí es esencial para saber dónde vamos a estar. Finalizado este mes, seguramente tendremos muchos más puntos de análisis".
Preguntado por si ha pedido a Pedro Sánchez que medie para que la Fiscalía modifique la calificación del delito de rebelión y pida la absolución de los procesados, Torra ha sido tajante al recalcar que no le ha trasladado esta petición porque rechaza "negociar sobre los presos políticos", ya que ellos mismos le pidieron que no los usara como "moneda de cambio de nada".
Si finalmente hubiera condenas por el 'procés', ha indicado que sería el Parlament quien tomaría "las decisiones que fuesen necesarias", sin avanzar cuál sería la propuesta que trasladaría a la Cámara catalana, a la espera de los próximos acontecimientos.
En todo caso, ha precisado que las decisiones que se adopten deben ser "colectivas y de país": "El Parlament deberá tomar una decisión colectiva a la que me someteré.
Y, preguntado sobre si dimitiría o convocaría él mismo elecciones ante un escenario de sentencias condenatorias, ha recalcado: "Nunca antepondré circunstancias personales a lo que tiene que ser una decisión de país, y esa decisión la llevaré hasta el final y hasta las últimas consecuencias".
El presidente catalán ha hecho hincapié en que, a su juicio, la causa del 'procés' debería "archivarse" y ha exigido a la Fiscalía que "reconozca que todo esto fue un montaje y por lo tanto pida la absolución y el archivo".
En la víspera del primer aniversario de la concentración en el Departamento de Economía que acabó llevando a prisión al entonces líder de la ANC, Jordi Sànchez, y al presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha indicado que se siente "tan culpable como ellos".
Torra, que fue presidente de Òmnium en 2015, ha subrayado que habría hecho lo mismo que Cuixart: "Yo podría ser Jordi Cuixart, podría estar en prisión porque habría hecho lo mismo, que es defender la causa de la independencia de Cataluña pacífica y democráticamente".
En este sentido, ha recalcado que "gran parte de la sociedad catalana se siente juzgada" en la causa del "procés".
"Juzgar a políticos catalanes por organizar un referéndum no deja de ser juzgar a millones de catalanes que dieron apoyo a esos políticos para hacer un referéndum", ha concluido.