La Policía Local valenciana no prestará servicio en los desahucios que tengan lugar en la ciudad, como ocurría hasta la fecha, según ha anunciado este miércoles el alcalde de Valencia, Joan Ribó, que tiene el objetivo final de hacer de la localidad "una ciudad libre de desahucios". El regidor de Compromís ha comparecido junto a las concejalas de Seguridad Ciudadana, Sandra Gómez, y Vivienda, María Oliver, para explicar que el consistorio trabaja para evitar que el próximo lunes se ejecute el desahucio de una mujer de 70 años con una alta minusvalía y un hijo parado de larga duración.
Esta decisión ha sido comunicada a la Delegación de Gobierno, por la que la Policía Local no actuará en los desahucios, aunque dicha orden no evita que la Policía Nacional sí acuda a apoyar la acción judicial. Ribó ha explicado que la mujer tiene una discapacidad del 72%, un hijo parado y con problemas de salud, que cobra una pensión de poco más de 300 euros y mantiene una deuda de 55.000 euros por adaptaciones en su vivienda con el Banco Primus, que opera por internet y pertenece a un conglomerado del segundo banco francés, el BCP.
La orden del alcalde valenciano no evitará que la Policía Nacional sí acuda a apoyar la acción judicial
También ha detallado que, además de tomar la decisión de no enviar a los agentes, ha escrito una carta a los bancos involucrados para hacerles entender que la deuda es "insignificante ante el daño causado" y se ha puesto en contacto con el cónsul francés para que tome cartas en el asunto. Ribó ha explicado que trabajan con los movimientos sociales con el fin de "procurar en todos los casos una salida digna a las personas con problemas para asegurar su vivienda, que es un derecho básico", y ha resaltado que ciudades grandes como Madrid y Barcelona trabajan en esa misma línea.
Además ha añadido que la legislación española es "insuficiente" en materia de desahucios, aunque ha reconocido "algún avance para evitar desahucios a personas con minusvalías". Ribó ha asegurado que han dado el primer paso, pero que su objetivo es "escalonar una serie de medidas para conseguir una ciudad libre de desahucios".
Aunque ha dicho que es "demasiado pronto" para concretar otras medidas, ha asegurado que tienen "un plan de cara a la judicatura y a determinados bancos" y ha asegurado que se plantean la cesión de viviendas públicas o dejar de trabajar con el banco que quisiera ejecutar un desahucio. La concejala de Vivienda ha asegurado que el parque de viviendas municipales es "ridículo" con apenas 15 o 16 pisos y que trabajan en la línea de negociar con los bancos la cesión de sus viviendas, porque "sería incomprensible que el Ayuntamiento se pusiera a construir cuando hay viviendas vacías". Según Ribó, están estudiando experiencias de otras ciudades que han dado muy buenos resultados para seguir la misma línea y antes de final de año tener un borrador de un plan antidesahucios "para incluirlo en el presupuesto del año que viene".