Iñaki Urdangarin estrena libertad condicional con el mismo servicio de escolta que tenía cuando, tras anunciar su separación de la infanta Cristina, Vozpópuli reveló en exclusiva que el Ministerio del Interior protege al exduque de Palma con dos agentes cuyos honorarios corrían a cargo del Estado por un montante total de unos 8.000 euros. La polémica generada por esta información, sin embargo, no ha provocado cambios en la seguridad del todavía cuñado de Felipe VI.
Así lo confirman a este diario fuentes de los servicios de escolta del Ministerio del Interior, que hablan de una serie de "motivos prácticos" que han sido decisivos a la hora de tomar esta determinación.
En primer lugar, afirman estas fuentes, "no hay peor momento para quitar la protección a una persona determinada que cuando esa persona está en el foco". Además, reconocen, "la retirada de la escolta justo después de revelarse la noticia hubiera provocado aún más ruido".
"Solo había 18 disponibles"
A pesar de las especulaciones en los días posteriores, también se descartó un relevo en la pareja de escoltas, pertenecientes a la Policía Nacional, que protegen a Iñaki Urdangarin.
Cabe recordar, en este sentido, que se llegó a asegurar que los agentes iban a ser sancionados por un fallo de seguridad que permitió hacer las fotografías en las que aparecían el exduque de Palma y Ainhoa Armentia en Bidart.
Tal y como se indicó en estas páginas, los dos escoltas pueden acompañar a Iñaki Urdangarin en el extranjero, siempre y cuando «dejen las armas en la frontera», y en más de un viaje así lo hicieron, pero no hubo ninguna petición, por parte del exduque de Palma, de que fueran relevados por permitir que se hicieran esas fotografías.
En todo caso, las fuentes consultadas por Vozpópuli afirman que el relevo "no era tan fácil" porque "solo había 18 policías de los servicios de escolta disponibles" y, además, "su labor, a pesar de lo que pueda parecer desde fuera, se considera de alto riesgo, por lo que requerían de una adaptación o formación previa".
Libertad de movimientos
Los mismos escoltas que acompañan a Urdangarin en su día a día en Vitoria, por tanto, serán los mismos que le protejan en su nueva etapa de libertad condicional.
Según las fuentes consultadas, la vida del exduque de Palma no va a variar en exceso, ya que "ya disponía de libertad de movimientos", aunque "ahora no tendrá que avisar o pedir permiso al juez de vigilancia penitenciaria".
Con la libertad condicional ya obtenida, Iñaki Urdangarin va a trasladarse a Barcelona para hacer labores de 'coaching' con el Fútbol Club Barcelona, un trabajo de formación no remunerado durante un mes que, según transmitió el propio equipo blaugrana, ha sido aceptado por el aún marido de la infanta Cristina para enfocar su carrera hacia la "asesoría externa". Con él estarán también, como en Vitoria, sus escoltas.