El 9 de mayo en Rusia conmemora la victoria soviética sobre las tropas nazis en 1945 y es un día de orgullo nacional para la Federación. Por eso, el Kremlin ha estado preparando el desfile con especial ahínco las últimas semanas dado el avance de la "operación especial" que desarrolla en Ucrania, y que se ha centrado en la ofensiva para hacerse con el Donbas. Con Vladimir Putin en el poder, el 9 de mayo se ha convertido en una demostración de la fuerza de las tropas y el equipo militar, así como en una oportunidad para recordar los sacrificios de la Segunda Guerra Mundial donde veintisiete millones de ciudadanos soviéticos murieron.
Este año, la marcha militar ha cobrado un significado propio, en un contexto de guerra en el que Rusia ha justificado la ocupación ucraniana en una lucha contra "nazis". Así, el actual ministro de Defensa, el general Sergei Shoigu, ha felicitado a los militares y ha declarado que la festividad "personifica la hazaña inquebrantable de las personas que derrotaron a los invasores nazis". "Hoy, los soldados y oficiales del ejército ruso, cumpliendo con su deber militar, están al frente de la lucha contra los seguidores del nazismo, defendiendo de manera confiable los intereses nacionales de Rusia durante una operación militar especial en Ucrania", ha reiterado.
Así, si en un año normal el Día de la Victoria es la jornada donde Rusia 'saca pecho' de su fortaleza, este año los ecos épicos se han amplificado. Por eso, este lunes está marcado por una gran expectación de nuevos anuncios de Vladimir Putin por si concreta sus avances en la "operación especial" en Ucrania. En este sentido, el Kremlin ha negado todas las afirmaciones que apuntan a que declarará el fin de la guerra o que iniciará la independencia del Donbás. Aún así, cualquier cosa es posible, incluso una ofensiva más atroz en Ucrania.
Un ataque "preventivo"
Por ahora, a primera hora del desfile, el presidente ruso ha justificado que el ataque de Rusia ha sido "preventivo" en Ucrania ante la amenaza de la OTAN y Occidente, y aseguró que fue "una medida necesaria" y la "única posible" en esta situación. "Hemos visto cómo se despliegan infraestructuras militares, cómo cientos de expertos extranjeros trabajaron en Ucrania, cómo estaban suministrando armamento de la OTAN. El peligro iba creciendo cada día. Rusia realizó un ataque preventivo, fue una medida necesaria y la única posible en esta situación. Una decisión de un país soberano e independiente".
Día de enseñar la tecnología militar
El Día de la Victoria también es una jornada que saca a relucir el material militar soviético. Este año, la representación patriótica ha contado con 11.000 militares que incluía sargentos, oficiales, soldados, cadetes de toda Rusia y también niñas. A medida que avanzaba la marcha, los militares iban acompañados de una columna mecanizada de 131 unidades de "equipo militar moderno" con tanques T-72B3M, T-90 "Breakthrough" y T-14. Luego también han circulado vehículos mecanizados tipo Typhoon con módulos de combate como rifles monitorizados. El ejército ruso ha hecho gala, además, de su armamento de precisión enseñando los misiles tácticos Iskander-M, el sistema de cohetes Tornado-G y el obús autopropulsado MSTA-S. En cuanto a la defensa antiaérea del ejército de tierra, las fuerzas rusas han enseñado los misiles de mediano y corto alcance Buk-M3 y Tor-M2. Como ha explicado el Ministerio Ruso a través de su canal de telegram, "la tripulación del desfile de la 106 División Aerotransportada de la Guardia en los vehículos blindados de transporte de personal "Rakushka" incluyó participantes de la operación militar especial para liberar las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk".
Historia del desfile
El desfile del Día de la Victoria se remonta a la época del 'telón de acero', donde se le fue dando protagonismo desde que la URSS venció a las tropas de Hitler. Como explica la BBC, fue el expresidente Bosi Yeltsin quien revivió el evento en el 50 aniversario de 1995. Sin embargo, fue Vladimir Putin en 2008 quien lo convirtió en un evento anual con material militar. La identidad rusa se ha creado en gran medida con el telón del Día de la Victoria de fondo, con libros de historia que se divulgan en los colegios donde enfatiza que Rusia liberó a Europa en tiempos de guerra.