El senado de estatal de California ha aprobado este viernes una ley para restringir los regalos y los incentivos con que las compañías farmacéuticas premian a los médicos que prescriben sus medicamentos.
Con esta medida legislativa se quiere poner obstáculos a una práctica que, según una investigación de la Universidad de California en San Diego, alcanza los 2.400 millones de dólares en Estados Unidos. El estudio asegura que casi la mitad de los médicos estadounidenses en ejercicio han recibido pagos y regalos de la industria sanitaria.
La nueva ley SB 790 limita seriamente la costumbre de grandes compañías farmacéuticas de regalar viajes, vuelos, charlas pagadas o similares.
El senador McGuire, impulsor de la iniciativa, declaró que no duda en la honorabilidad de la mayoría de los médicos de su país, “que ponen primero las necesidades de sus pacientes” por encima de cualquier otra consideración. Pero a la vez reconoció que “la cada vez más evidente relación entre algunos médicos y las compañías farmacéuticas confirma lo que se venía sospechando”, esto es, que los incentivos económicos modifican los hábitos de prescripción de medicamentos.
La Universidad de California revela que los médicos que reciben regalos de la industria tienden a recetar de dos a tres veces más medicamentos de marca frente a los genéricos, que son más baratos. De ahí que el senador McGuire haya resaltado la importancia de la ley, en tanto viene a proteger los derechos de pacientes, además de contribuir al abaratamiento de las medicinas.