Así lo ha expresado la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, en una rueda de prensa en la que ha incidido en que "no es momento de poner trabas" a la investigación sobre el coronavirus de la OMS, que ya realizó una primera indagación en el laboratorio de la ciudad china. "Junto con otros estados de todo el mundo, seguimos pidiendo que China proporcione el acceso necesario a los datos y las muestras. Esto es crítico para que podamos entender y prevenir la próxima pandemia", ha dicho.
También ha resaltado, según recoge EFE, el compromiso de la OMS de llevar a cabo una segunda fase "transparente, dirigida por expertos y libre de interferencias".
Según Psaki, la primera fase de análisis no contó con los datos y la participación "necesaria" por parte de Pekín, por lo que ha insistido en la necesidad de llevar a cabo una nueva etapa con "enfoque multilateral". "Está claro que China no está cumpliendo con sus obligaciones. En lo que nos centramos es en construir este esfuerzo y apoyo multilateral para presionar y dejar claro que es inaceptable y peligroso", ha añadido al respecto.
Respuesta de China
El subdirector de la Comisión Nacional de Salud china, Zeng Yixin, rechazó este jueves los planes anunciados de la OMS, los cuales tachó de "sin sentido" y de "ir en contra de la ciencia".
La organización internacional propuso una nueva investigación ya que reconoció que China no compartió los "datos brutos" de los primeros casos detectados a finales de 2019. Por ello, pidió que "sea transparente, abierta y que coopere, particularmente en los datos brutos sobre los primeros días de la pandemia".
El primer caso de covid fue detectado en la ciudad de Wuhan a finales del año 2019, y, desde entonces, se han registrado en el país 104.362 casos y 4.848 muertes a causa de la enfermedad.
