El despacho del fundador y exlíder del ultranacionalista Frente Nacional Jean-Marie Le Pen en Saint-Cloud, a las afueras de París, ha sido registrado este miércoles por agentes que investigan un presunto blanqueo de capitales y fraude fiscal. La Fiscalía financiera abrió en junio una investigación por una presunta omisión de declaración de patrimonio obligatoria para los parlamentarios contra el fundador del Frente Nacional, excluido por el partido bajo la presidencia de su hija Marine.
"Soy objeto de la atención minuciosa, incluso inquisitorial, de los agentes del fisco desde hace una decena de años", alegó el líder ultranacionalista
Jean-Marie Le Pen desmintió en un comunicado haber "trasgredido la ley", al tiempo que se mostró "indignado por la violencia judicial injustificada" a la que se ve sometido. "Soy objeto de la atención minuciosa, incluso inquisitorial, de los agentes del fisco desde hace una decena de años. Como siempre, gobierne la izquierda o la derecha, parece que el calendario electoral dirige los actos" judiciales que son mediatizados, agregó.
Los servicios antiblanqueo del ministerio de Economía sospechan que Le Pen puede tener una cuenta bancaria escondida en el extranjero basada en Ginebra (Suiza), según reveló en abril pasado la revista digital Mediapart.
Además de dinero, Le Pen tendría lingotes y piezas de oro por un valor total de 2,2 millones de euros, en un fondo gestionado por su asistente personal, Gérald Gérin, según el mismo medio. Esa investigación es paralela a la que la justicia realiza por la financiación de las campañas electorales del Frente Nacional tras el ascenso de su hija a la presidencia del partido, que pudo inflar las facturas de los gastos pagados por el Estado.