La Aviación Civil de Jordania decidió este sábado cerrar de forma temporal el espacio aéreo del país como medida "preventiva" ante la amenaza de un posible ataque de Irán contra Israel, informaron medios oficiales.
"La Autoridad Reguladora de la Aviación Civil de Jordania ha decidido cerrar el espacio aéreo jordano a todas las aeronaves que lleguen, salgan y estén en tránsito de forma temporal y preventiva a partir de las 20.00 GMT", indicó la agencia oficial de noticias jordana, Petra.
Esta suspensión se prolongará "durante las próximas horas" y "se actualizará y revisará continuamente en función de la evolución de la situación", señaló.
De acuerdo con la televisión estatal jordana Al Mamlaka, esta decisión se ha tomado "ante la escalada de riesgos en la región", así como para "preservar la seguridad y la protección de la aviación civil en el espacio aéreo jordano".
Jordania es el primer país que cierra por completo su espacio aéreo ante la amenaza iraní de un ataque a Israel, ya que durante estos últimos días varias aerolíneas han decidido suspender sus vuelos a Irán como medida preventiva ante la situación en Oriente Medio.
Jordania hace frontera con Irak y Siria, países donde están presentes milicias proiraníes que suelen atacar posiciones israelíes y estadounidenses en la región.
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, dijo hoy que Israel ha incrementado su capacidad de defensa y ataque ante la posibilidad de "un ataque planificado por Irán y sus representantes contra el Estado de Israel"
Este anuncio se produce horas después de que la Guardia Revolucionaria iraní secuestrara hoy un buque en el golfo Pérsico, vinculado con la empresa ‘Zodiac Maritime’ propiedad de un multimillonario israelí y con bandera portuguesa.
Esta captura elevó aún más la tensión en la región, pero sobre todo en Israel, que aguarda un ataque en represalia -orquestado por Irán pero que podría llegar desde países aliados- tras el bombardeo del consulado iraní en Damasco el pasado 1 de abril, en el que murieron siete miembros de la Guardia Revolucionaria y seis ciudadanos sirios.