Motivo del viaje: estudio, trabajo o jugar a videojuegos. Los gamers podrán moverse con más facilidad por la Unión Europea si sale adelante la propuesta del Parlamento Europeo para crear un visado especial para aquellos que vayan a participar en competiciones internacionales de videojuegos, los llamados esports. Europa quiere atraer a su territorio a un sector que gana cada vez más adeptos e inversores y, de paso, utilizarlo como plataforma para defender los "valores europeos".
En la resolución aprobada en la Eurocámara, a la que ha accedido Vozpópuli, se pide a los Estados miembros y a la Comisión Europea que consideren "la creación de un visado para el personal que se dedica a esports basado en los visados culturales y deportivos de la zona Schengen". El visado sería "aplicable a todo el personal involucrado en la organización y participación en competiciones de esports".
Antes de que este visado se apruebe, el Parlamento ha solicitado que se estudien medidas para facilitar la entrada a la Unión Europea de los gamers. Jugar muy bien al Fifa, el League of Legends o el World of Warcarft -algunos de los videojuegos con más éxito online- podría facilitar a los extracomunitarios la posibilidad de instalarse en Europa.
Más dinero para los esports
Mientras la UE pone el foco en esta industria, que mueve millones de euros y que emplea en la región a 98.000 personas según los últimos datos, en España hay un retraso importante en la regularización del sector. Voces de los esports exigen una ley que conceda normalidad jurídica a los gamers y que se trabaje en desestigmatizar a esta parte de la población, a la que suele asociarse con el infantilismo pese a que hay gente que juega a videojuegos a cualquier edad.
Entre las medidas que quiere tomar el Parlamento Europeo se encuentra el impulso del comercio internacional de videojuegos creados en la UE. Para ello, ha solicitado al órgano que dirige Ursula von der Leyen que mapee y defina la industria europea de los videojuegos y que considere la creación de una etiqueta de 'Videojuego europeo'.
Bruselas quiere aprovechar la ola exitosa de los esports utilizando los videojuegos como vía para promover "la historia, la identidad, el patrimonio, los valores y la diversidad europeos a través de experiencias inmersivas". El Parlamento considera que los videojuegos pueden reforzar el soft power (poder blando) europeo, es decir, su poder de atracción, una de las herramientas con la que trabajan la política exterior los Estados.
En este sentido, la Eurocámara ha solicitado a la Comisión que se elabore un tratado para promover los valores europeos en las principales competiciones de esports, colaborando con "editores, organizaciones de equipos, clubes y organizadores de torneos".
Igualdad de género en los videojuegos
El Parlamento Europeo también muestra su preocupación por la "imagen estereotipada" que se muestra de la mujer en los videojuegos, y cree que se deben tomar medidas al respecto, aunque no especifica cuáles. "A pesar de los esfuerzos que se han realizado para logar una representación fiel, igualitaria y no estereotipada de la mujer en los videojuegos, se debe seguir avanzando en la consecución de una mayor igualdad de la mujer en todos los puestos de la cadena de valor, así como avances en la lucha contra el abuso sexual y la discriminación", señalan los eurodiputados.
Otro de los aspectos donde Europa cree que el sector videojuego tiene algo que decir es en la "transición ecológica". A este respecto, apunta que la industria del gaming tiene que "trabajar para ser más respetuosa con el medio ambiente y convertirse en vía de concienciación para los jugadores de videojuegos sobre las cuestiones climáticas y medioambientales".
