El presidente de Italia, Giorgio Napolitano, ha asumido personalmente este jueves la tarea de formar gobierno en el país tras el fracaso de las negociaciones desarrolladas por Pier Luigi Bersani, líder del Partido Democrático. "El presidente de la República ha decidido emprender sin demora las acciones que le permitan escudriñar posibles avances en la situación política e institucional", ha declarado su secretario, Donato Marra, informa Europa Press.
A la breve comparecencia Marra, para informar del resultado de la reunión que Bersani y Napolitano han mantenido en el Palacio del Quirinal de Roma, le ha sucedido una alocución del propio líder del centroizquierda. Bersani, quien cuenta con mayoría absoluta en la Cámara Baja, pero no en el Senado, ha confirmado que las consultas que ha llevado a cabo desde el pasado sábado no fueron "resolutivas" y ha asegurado que le explicó a Napolitano las "dificultades derivadas de las negativas o las condiciones" expresadas por algunas formaciones, que no consideró "aceptables", informa Efe. Instantes después, fuentes de la formación de Bersani, el Partido Demócrata (PD), han precisado que este resultado de las consultas de su secretario general no supone que este haya renunciado a intentar formar Gobierno.
Tras las breves comparecencias sin preguntas, al término de una reunión de casi hora y media de duración, las incógnitas del futuro Ejecutivo italiano siguen abiertas, después de que Bersani recibiera el pasado viernes el encargo de buscar apoyos para intentar formar Gobierno tras las consultas hechas por el propio Napolitano durante dos días.
Reuniones sin resultados
En los últimos seis días Bersani se ha reunido tanto con los agentes sociales como con los partidos políticos, concluyendo este jueves la ronda con las dos principales formaciones de su coalición, que abogaban por que acudiera al Parlamento a intentar lograr la investidura, a pesar de no haber recibido apoyo expreso de parte de otras fuerzas parlamentarias.
El martes pasado, Bersani rechazó la opción propuesta por Angelino Alfano, el secretario general del Pueblo de la Libertad (PDL), el partido de Silvio Berlusconi, para formar una "gran coalición" entre su partido de centro-derecha y el partido de Bersani, planteando incluso que Alfano fuera el viceprimer ministro de dicho gobierno, algo que descartó el líder del PD, que rechazó que se pueda pasar de la "guerra" a los "abrazos" entre los dos partidos.
Grillo, por su parte, mantiene su promesa electoral de bloquear cualquier intento de Gobierno. Ayer miércoles estiró aún más las ya de por sí tensas relaciones entre los partidos italianos calificando a los responsables de las principales formaciones de "padres puteros de la política", al tiempo que les pidió que dejen de "dar por el culo" con la "gobernabilidad".