El 'patinazo machista' protagonizado el pasado viernes por el candidato 'popular' a las elecciones europeas, Miguel Arias Cañete, ha llegado a la prensa internacional. Este domingo el conservador germano 'Die Welt' publica un artículo titulado "España: el hombre de las cavernas y la superioridad de los hombres" en el que se hace eco de las salidas de tono realizadas por el hasta ahora ministro de Agricultura.
El periódico alemán se centra en la tormenta que se desató en Internet después de que Arias Cañete dijera que "debatir con una mujer es complicado porque mostrar superioridad intelectual da una impresión machista" y señala que durante varios días el político del PP ha sido conocido en Twitter como #HomoCañetus, "un descendiente directo de los habitantes de las cuevas ibéricas".
Lejos de quedarse en este último tropiezo, 'Die Welt' no olvida otros episodios en los que "el que fuera responsable de Agricultura bajo el mandato de José María Aznar mete la pata". Hasta los alemanes recuerdan aquella frase que Cañete dijo en 2008 de "es difícil encontrar un camarero como los de antes" para defender la propuesta de "un contrato de integración" para inmigrantes propuesto por Rajoy para que éstos se integraran y, si no, volvieran "voluntariamente a sus países".
Tras recordar sus palabras sobre la fecha de caducidad de los yogures, "yo veo un yogur que pone una fecha y yo me lo como 5 días más tarde porque nunca me ha sentado mal", el rotativo alemán concluye con una referencia a otra de sus frases más polémicas: aseguró que se ducha con agua fría "antes que consumir medio litro más".
En la misma línea, el británico 'The Guardian' publica otro artículo en el que acopia las reacciones que han provocado las declaraciones de Cañete en la oposición, destacando la defensa hecha por compañeras de partido como Alicia Sánchez Camacho y Ana Botella.
La líder de los 'populares' en Cataluña criticó que se prestara más atención a opiniones personales que a lo dicho en el debate televisado mientras que la alcaldesa de Madrid pidió "no sacar las cosas de quicio" ya que "todos hacemos muchos comunicados, algunos más apropiados que otros".
