Cualquier cambio en Vocento, el grupo controlado por las familias Ybarra, Luca de Tena, Urrutia y Bergareche, levanta sospechas. La última novedad en el siempre convulso consejo de administración del conglomerado mediático es que los hermanos Bergareche acaban de cerrar su operación para mantener su puesto y, por ello, su voto, según consta en un hecho relevante enviado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Entretanto, no cesan los rumores contrapuestos sobre las maniobras soterradas de algunos de sus miembros para cambiar el complejo equilibro de poder en el holding. Pero, al decir de las fuentes oficiales, se trata solo de eso, rumores.
En todo caso, lo innegable es que Santiago Bergareche Busquet mantendrá su silla en el consejo de administración. Había ciertas dudas al respecto después de que los hermanos decidieran a finales de 2013 liquidar la sociedad Bycomels, a través de la que controlaban casi el 8% del grupo mediático. Se llegó a especular con que la familia se olvidaba del grupo. Ahora, según consta en el hecho relevante mencionado, dos de los familiares ceden el sentido de sus votos a favor de la entidad Mecamur S. L., controlada por el mencionado Santiago. Más en concreto, las sociedades Boratepa S.L. y Edula S.L., controladas por los hermanos José María y Jorge, respectivamente, han comunicado al consejo de administración sus intenciones.
Tras el compromiso "irrevocable" e "indefinido" de dos de sus hermanos, Santiago Bergareche pasa a controlar un 4,79% del derecho de voto de Vocento
El hecho relevante deja claro el movimiento. "Los citados Accionistas, titulares conjuntamente de 3.990.155 acciones de Vocento,representativas aproximadamente del 3,193% de su capital social, se comprometen irrevocablemente a votar en el mismo sentido que Mecamur o, alternativamente, a delegar en favor de Mecamur el ejercicio del derecho de voto y demás derechos políticos sobre las acciones de Vocento que los Accionistas poseen en la actualidad o que en el futuro puedan adquirir (las “Acciones”), en cada una de las Juntas Generales de Vocento que se celebren durante la vigencia de dicho compromiso". Un compromiso que es "indefinido" y que solo se puede modificar mediante un preaviso de al menos tres meses. Como consecuencia, ahora el consejero Santiago Bergareche Busquet "pasaría a ser titular directo o indirecto de derechos de voto representativos de aproximadamente el 4,79% de Vocento".
La batalla, ahora soterrada
En el conglomerado que edita ABC y una quincena de periódicos regionales siempre ha habido una pelea latente entre las diferentes familias por hacerse con el control del consejo. Además del presidente, Enrique de Ybarra, y del consejero delegado, Luis Enríquez, tienen asiento en el cónclave diferentes representantes de los Luca de Tena, los Urrutia y los Bergareche, sin olvidar al siempre inquieto Jaime Castellanos y a varios consejeros independientes como Miguel Antoñanzas y Rodrigo Echenique. Tanta y tan diversa es la composición del cónclave que han sido muchas las peleas entre unos y otros en los últimos años.
Hace dos años el grupo 'rebelde', formado por Castellanos, los Urrutia y los Bergareche, intentó hacerse con el poder
La batalla más sonada se produjo hace dos años, cuando el grupo rebelde, formado por Castellanos, los Urrutia y los Bergareche, intentó dar un golpe de timón. Finalmente, las aguas volvieron a su cauce gracias a que Ybarra logró la paz interna que parecía imposible. Los consejeros pasaron a ocuparse de las cuentas y no tanto de sus cuitas por el poder. Por supuesto, ahora las fuentes oficiales hablan de tranquilidad en el consejo, algo casi inaudito teniendo en cuenta los antecedentes.
Otras fuentes, no obstante, no son tan optimistas e insisten en que la batalla siempre se mantiene entre unos y otros, aunque sea, como ahora, de forma soterrada. Incluso, aseguran, siguen en marcha algunos movimientos orquestados por varios rebeldes para colocar al frente del consejo a uno de los consejeros independientes antes mencionados. Pronto, todos se verán las caras para aprobar las cuentas de 2013.