En uno de los segmentos con mayor potencial de crecimiento no podía faltar Volkswagen. Con el T-Roc, la marca alemana inicia su incursión en uno de los segmentos más de moda, el de los todocaminos de carácter urbano, en el que manda, por encima de todo, el diseño. Y de eso no le falta a este pequeño SUV que mide poco menos de 4,2 metros de longitud y 1,57 de altura y cuya plataforma está basada en la misma que Volkswagen emplea en el actual Golf.
Su interior ofrece capacidad para cinco plazas y un diseño en el salpicadero muy moderno, disponiendo opcionalmente de la última generación del cuadro de instrumentos digital Active Info Display completamente digitalizados y sistemas de infoentretenimiento en pantalla de hasta 8 pulgadas. Tanto el cuadro de instrumentos digital Active Info Display como el sistema de infoentretenimiento han sido diseñados para utilizar la mayor cantidad posible de servicios en línea y aplicaciones a través del smartphone y de Volkswagen Car-Net.
Todas las versiones del T-Roc tendrán de serie, entre otros elementos, frenada automática de emergencia en ciudad y sistema de detección de peatones, alerta por cambio involuntario de carril o detección de cansancio del conductor. Opcionalmente hay programador de velocidad activo, alerta de tráfico trasero al salir de plazas de aparcamiento, asistente de cambio involuntario de carril, control de objetos en el ángulo muerto que dejan los espejos retrovisores, asistente de conducción en atascos o aparcamiento semi-automático.
A diferencia de casi todos los pequeños SUV actuales, el T-Roc cuenta con tracción permanente a los cuatro ruedas. En función del tipo de trazado por el que se circule, se pueden elegir entre cuatro perfiles de conducción: Confort, Normal, Sport, Eco e Individual. Además, con el sistema de tracción total también lleva una función (4MOTION Active Control) que permite, desde un mando circular, activar cuatro modos de funcionamiento del sistema de tracción; dos para carretera (Street y Snow) y dos para fuera de vías asfaltadas (Off-road y Off-road Individual). Al accionarlos se modifica el funcionamiento del sistema de tracción, la respuesta del motor y del cambio automático DSG y el ABS. Además, en el modo Off-road se activa un dispositivo compuesto por unos led y unas cámaras, que recogen información de los obstáculos que hay en la parte delantera y trasera del vehículo y que pueden verse en la pantalla de una tableta extraíble situada en la consola.
Y bajo el capó, el T-Roc llega de inicio con tres motores de gasolina (TSI) y tres diésel (TDI), con potencias de 115, 150 y 190 CV. Las versiones de 115 CV se ofrecen con tracción delantera y caja de cambios manual. En combinación con los motores de 150 CV existe la posibilidad de seleccionar tracción delantera, tracción total (4MOTION) y cambio de doble embrague DSG de 7 velocidades. El motor de gasolina más potente de 150 CV dispone de la gestión de cilindros activa (basada en la desconexión automática de dos cilindros). Los dos motores de 190 CV incorporan de serie el cambio de doble embrague DSG de 7 velocidades y el sistema de tracción total 4MOTION.
