Potenciar en los híbridos el funcionamiento del motor eléctrico. Es el camino que están tomando muchas marcas para poder hablar de una tecnología verdaderamente eficiente, permitiendo sobre todo en el día a día exprimir el potencial de unos motores que permiten moverse en el medio urbano con cero emisiones y sin consumo alguno de carburante durante un buen número de kilómetros, cada vez más elevados. Así, con una versión híbrida ya en la gama, el C300 BlueTEC HYBRID, Mercedes-Benz lanzará al mercado en marzo una versión provista de sistema de recarga de batería por cable, aumentando de manera notable las cualidades como turismo eléctrico.
Será, por tanto, el primer híbrido enchufable de la Clase C, un modelo que combina un motor de gasolina de 211 CV con otro eléctrico de 82 CV que, entre ambos, alcanzan un rendimiento máximo de 279 CV. La batería de iones de litio permite una autonomía al motor eléctrico de 31 kilómetros y va situada bajo del piso del maletero, por lo que resta espacio de carga, reduciendo de 480 a sólo 335 litros en el sedán, una de las principales pegas, limitando mucho su funcionalidad como turismo familiar para viajes largos.
La batería se puede cargar durante las fases de frenado, mediante el motor de gasolina activando un modo llamado «Charge» o conectándola a un enchufe a través de una toma de corriente situada en la parte derecha del parachoques trasero. Según Mercedes-Benz, en una red convencional necesita unas dos horas aproximadamente para recargarla por completo. Por su parte, el motor de gasolina es el mismo de la versión C250, un cuatro cilindros de dos litros de cilindrada y con turbocompresor, provisto de la caja automática 7G-TRONIC PLUS.
El sistema híbrido tiene cuatro modos de operación: «Hybrid», «E-mode», «E-save» y «Charge». En el modo «Hybrid» funcionan tanto el motor de gasolina como el eléctrico buscando siempre la mayor eficiencia posible. En «E-mode» sólo se utiliza el motor eléctrico mientras haya carga de batería disponible, con una autonomía máxima oficialmente de 31 kilómetros pudiendo llegar hasta los 130 km/h de velocidad. Si el sistema detecta en el pedal del acelerador mayores prestaciones, el motor de gasolina entra en funcionamiento pasando al modo Hybrid. «E-save», por su parte, sirve para mantener la carga de la batería a un determinado nivel, permitiendo así utilizar el «E-mode» unos kilómetros más adelante. En caso de que la batería se encuentre a un nivel bajo, se puede recargar activando el modo «Charge» que hace que parte de la energía del motor de combustión se derive a esta tarea.
Además de los modos de funcionamiento del sistema, el conductor puede elegir entre cinco programas de conducción: «Comfort», «Economy», «Sport», «Sport+» e «Individual». El modo «Comfort» optimiza el consumo de combustible y la recuperación de energía en las fases de frenado y deceleración, el modo «Economy» trata de reducir el consumo de energía al mínimo desconectando el motor de gasolina en cuanto es posible y reduce la tasa de recuperación de energía durante las deceleraciones en favor de una circulación a vela, como si circulara en punto muerto. Además, si se programa una ruta en el sistema de navegación la tiene en cuenta para hacer uso de un motor u otro según el relieve del recorrido.
Con todo, las prestaciones del C350 PLUG-IN HYBRID son propias del potencial que desarrolla el sistema híbrido, acelerando de 0 a 100 km/h en 5,9 s y alcanzando una velocidad máxima de 250 km/h… con un consumo medio homologado de 2,1 l/100 km.