Es el más accesible de los modelos de Porsche junto al propio Boxster, un modelo que ahora se renueva por completo en busca de mejorar sobre todo la eficiencia de sus motores, pero también en busca de un comportamiento aún más eficaz en conducción rápida. Para ello, de entrada ha recibido una cura de adelgazamiento que le ha llevado a perder en torno a 30 kilos de peso.
Estéticamente cuenta, además de con un diseño evolucionado, con unas proporciones diferentes, con voladizos algo más cortos, una distancia entre ejes ampliada y llantas de 18 pulgadas en sus versiones estándar. La silueta es algo más afilada, con un frontal en el que destaca unas entradas de aire para la refrigeración de mayor tamaño y en el estrena nuevos grupos ópticos tomados del Boxster que llegó al mercado a principios de este 2012.
Además de diseño, Porsche ha querido reforzar el dinamismo del Cayman aportando mejores sensaciones aun a la conducción. Junto a la mayor distancia entre ejes, se ha ampliado la anchura de vías del eje delantero para favorecer un mejor guiado en curva, con una mayor precisión en la trazada y unas reacciones más previsibles.
La gama de motores contemplará como en el modelo actual dos versiones distintas, ambas basadas en el bloque de seis cilindros opuestos. La menos potente de ellas será el 2,7 litros de 275 CV, con el que el Cayman alcanza una velocidad máxima de 266 km/h y es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 5,4 segundos. Con un menor peso que en el modelo anterior y una afinada puesta a punto de los motores, el consumo medio baja hasta los 7,7 l/100 km de valor medio en la versión con cambio automático de doble embrague PDK, casi 1,5 litros menos que en la versión anterior.
El Cayman S monta el bloque de 3,4 litros y 325 CV, mejorando de forma notable el rendimiento de la versión menos potente. Alcanza los 100 km/h en apenas 4,7 segundos y lleva su velocidad máxima hasta casi 285 km/h, con un consumo medio homologado ligeramente superior, 8,0 l/100 km .
Ambos modelos estarán a la venta a partir del próximo mes de marzo de 2013, con unos precios que, al menos por una vez, serán inferiores a los de las versiones que sustituye. Así, el Cayman costará 57.461 euros, casi 1.500 euros por debajo del actual. En el caso del Cayman S, su precio queda en 74.388 euros con cambio manual, aunque dado el actual sistema impositivo, la versión con cambio automático PDK —que homologa menores consumos—, sólo costará 365 euros más.