Agentes de la Policía Nacional han detenido a catorce personas en Igualada (Barcelona) por obtener y cobrar de manera fraudulenta prestaciones de incapacidad en una estafa que hasta el momento asciende a 382.673,32 euros.
La mujer artífice de la trama captaba a los solicitantes entre sus contactos habituales a cambio de cantidades de entre 200 y 850 euros, y accedían así a las prestaciones tras presentar informes médicos con patologías muy llamativas que requerían un adiestramiento previo para poder simular los síntomas.
La investigación se inició a raíz del intento de 19 personas de acceder a prestaciones de incapacidad permanente absoluta y de gran invalidez, tras lo cual la Inspección de Servicios de la Dirección General del Instituto Nacional de la Seguridad Social reclamó la actuación de la Policía. Después de las primeras pesquisas se dio con la cabecilla de la trama, quien ofrecía a sus contactos acompañarlos a las citas de valoración médica haciéndose pasar por un familiar y aportar informes previamente falsificados, todo a cambio de una determinada cantidad de dinero.
Entre las patologías que presentaban ante los médicos evaluadores existían síntomas muy llamativos tales como inhibición motora total, inhibición lingüística, desconexión del entorno y otras similares, por lo que requerían de una preparación previa para poder simularlos, una especie de ensayo para habituarse al 'papel' que luego representaban ante el facultativo.
La Policía también contactó con los médicos y especialistas que firmaban los informes falsos, que admitieron el engaño. Algunos expedientes eran completamente fraudulentos, otros habían visto modificadas sus fechas o se habían eliminado o agregado párrafos que no aparecían en los originales, y el resto aparecían firmados por médicos que no constaban en el colegio profesional de Barcelona.
La mayoría de las personas que intentaron acceder a las prestaciones contaban entre 35 y 60 años, prácticamente todas poseían el carnet de conducir sin restricciones ni limitaciones y una vez entrevistados en dependencias policiales, no mostraron ninguna sintomatología, contrariamente a lo representado en las unidades de evaluación médica.
La operación continúa abierta pendiente de la localización y detención de más personas implicadas en la trama.