Es probable que prácticamente la mayoría de los usuarios de smartphones tenga descargada la aplicación WhatsApp, una manera relativamente reciente de intercambiar mensajes con toda la libreta de contactos del teléfono y que facilita sobremanera la comunicación instantánea entre personas. Sin embargo también es probable que gran parte de esa mayoría desconozca las diferentes utilidades de una aplicación que empieza a concebirse como una herramienta básica a la hora de, por ejemplo, rescatar personas perdidas.
No parece arriesgado decir que WhatsApp puede salvarte la vida. En los últimos meses, el Grupo Especial de Rescate en Altura (GERA) la ha utilizado al menos en ocho ocasiones para el rescate de excursionistas. El más reciente tenía lugar este pasado lunes, cuando dos montañeros perdidos en el pico de Peñalara (Madrid) fueron rescatados con vida tras pasar una noche a la intemperie. Ambos sobrevivieron gracias a que construyeron una especie de iglú para resguardarse de las bajas temperaturas y la ventisca, y a que lograron enviar su localización por WhatsApp al grupo especial de bomberos. Lo hicieron antes de que se cargase el mapa completamente, lo que supuso q la aplicación no ubicara exactamente el lugar y retrasara ligeramente el encuentro.
Los excursionistas compartieron con el GERA su ubicación, lo que facilita las coordenadas con un margen de error de solo 10 metros
Son los más recientes, pero no han sido los únicos. El pasado mes de enero siete excursionistas asiáticos fueron rescatados también en Peñalara utilizando el mismo sistema, y el 28 de diciembre era en La Pedriza (también en Madrid) donde cuatro montañeras eran localizadas gracias a la aplicación.
El sistema parece sencillo: el teléfono móvil de cualquiera de los excursionistas añade a su agenda el número del dispositivo de los GERA para que le aparezca como un contacto más. A partir de ahí, se trata de iniciar un chat como con cualquier otro usuario, utilizando la opción de "compartir ubicación". La aplicación, que combina las nuevas tecnologías en telefonía móvil con la localización GPS, envía las coordenadas con un margen de error de 10 metros.
Otro concepto de comunicación
En pleno debate sobre si la compañía cobrará a los usuarios por el uso de la aplicación, también esta semana se ha conocido que la misma ha resultado ser un punto clave para lograr la detención de un amplio grupo de butroneros en toda la geografía española.
Y es que WhatsApp se ha convertido en la manera más fácil y efectiva de poder coordinar a quince unidades policiales, unos 200 agentes que durante seis meses mantuvieron el contacto en la que llamaron 'operación Joy' para poder detener el pasado 20 de marzo a doce butroneros.
Para optimizar el trabajo, los jefes de cada grupo abrieron un chat cerrado de WhatsApp para ir compartiendo las diligencias que llevaban a cabo o simplemente para intercambiar datos necesarios sobres las personas a las que tenían en seguimiento.
¿Gratuito o de pago?
Por otro lado, la aplicación mantiene desde hace semanas cierta incertidumbre entre sus usuarios tras el cruce de afirmaciones entre quienes afirmaban que la descarga sería de pago o quienes decían que habían actualizado su licencia gratuitamente. Bajarse la aplicación en dispositivos de Apple ya costaba 0,89 céntimos a los usuarios, algo que la compañía quería imponer también a los usuarios de Android. Sin embargo, parece que finalmente la plataforma ha dado marcha atrás, y está procediendo a actualizar las licencias aleatoriamente y de manera gratuita, por lo que el debate parece cerrado.
La aplicación, que finalmente parece que no cobrará a los usuarios los 0,89 céntimos de la descarga, tiene en la japonesa Line a su principal competidora
Sin embargo, la posible fuga de clientes podía ser la principal razón por la que WhatsApp ha decidido no cobrar por su descarga. Los últimos datos apuntan a que el servicio nipón Line se ha convertido en su principal competidor, ofreciendo además el plus de las llamadas vía internet y asegurando que siempre será gratuito.
Además, entre los competidores de WhatsApp también intenta posicionarse la plataforma de comunicación WeChat de Blackberry, que facilita la búsqueda de nuevos amigos que sean usuarios de la aplicación y que se encuentren en zonas cercanas, gracias a su servicio de geolocalización.
De momento, sólo Line parece estar haciéndole sombra a WhatsApp, mientras que el debate ha empezado también a moverse por las redes sociales. Con una red de usuarios tan extendida, la pregunta es si el público optará por cambiar de plataforma a otra que garantice la gratuidad con, aparentemente, el mismo servicio, o por mantener la actual aplicación pagando un precio de 0,89 céntimos. Para aquellos a los que WhatsApp les ha podido salvar la vida, la respuesta puede ser obvia.