¿Conocen ustedes a Sus Majestades los Reyes Magos de Oriente, Melchor, Gaspar y Baltasar? Olvídense de ellos, no son los protagonistas de este artículo. Esta noche es especial, en ella

Las añagazas propagandísticas con que Maduro espolvorea su artículo en ‘El Páis’ son tan grotescas que llevan incorporadas su propia refutación

En los 14 años que gobernó Venezuela, el comandante-presidente copó todos espacios políticos posibles, subyugó a los poderes del Estado, impuso una nueva legalidad como un traje a la medida de sus ambiciones, pulverizó a sus enemigos borrando del mapa el viejo y agotado bipartidismo, definió un discurso antiimperialista con el que logró abrirse un lugar en el tablero internacional.

Venezuela vive este momento sumida en la incertidumbre. Tras la última devaluación del bolívar del 32%, las  empresas españolas como Telefónica, BBVA y Repsol verán mermados sus ingresos cuando intenten cambiar la cifra de sus ganancias a dólares.

Idolatrado y odiado a partes iguales, nadie cuestiona la influencia de Hugo Chávez en Venezuela. Desde que accediera a la presidencia en 1998 ha gozado de un apoyo popular que le ha respaldado en las urnas hasta en tres ocasiones. El líder estaba legitimado para continuar con su proyecto socialista hasta 2020 pero su muerte deja ahora en el aire el futuro político del país. 

Con el respaldo del Tribunal Supremo y la Asamblea Nacional, Hugo Chávez obtiene una prórroga para no presentarse a la toma de posesión. Sin embargo, para los constitucionalistas, sin juramento, Chávez no está investido de su condición de Presidente. El periodo no comienza. Por tanto el mecanismo, además de inconstitucional, supone un vacío de poder.