El presidente encargado de Venezuela, Nicolás Maduro, ha inscrito este lunes su candidatura para las elecciones presidenciales del 14 de abril en la sede del Consejo Nacional Electoral (CNE) acompañado de miles de personas y con el mismo programa que el de las elecciones presidenciales de octubre de 2012 ganadas por el fallecido presidente Hugo Chávez, con el objetivo de defender su legado.
Maduro ha llegado a la sede de la Comisión conduciendo un autobús para presentarse como el aspirante del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). El presidente Hugo Chávez, que murió el pasado 5 de marzo tras un año y medio de lucha contra el cáncer, anunció el pasado 8 de diciembre que los venezolanos debían elegir a Maduro como jefe de Estado en caso de que le sucediera algo.
Miles de venezolanos vestidos del rojo del PSUV han acompañado por las calles de Caracas a Maduro para respaldar su candidatura, entre gritos de "Con Chávez y Maduro, el pueblo está seguro". Al inicio del acto, los presentes han escuchado una grabación del himno nacional, cantado por Chávez.
El presidente encargado ha comparado a Chávez con el líder revolucionario Simón Bolívar, aunque ha destacado que a Bolívar le traicionó la burguesía y el presidente falleció apoyado en el pueblo. Maduro ha destacado que Chávez murió como comandante y presidente, "aquí en Caracas", con "el amor incondicional" del pueblo venezolano
Maduro ha defendido las reformas del mandatario fallecido, ya que entregó "lo único que tenía: su salud", y ha anunciado que se presenta con el mismo programa que su antecesor presentó en los comicios presidenciales de octubre pasado. "Vengo a cumplir de orden Chávez. No soy Chávez, pero soy su hijo, y todos juntos, el pueblo, somos Chávez. Vengo a entregar el mismo programa de la patria que él entregó hace 9 meses", ha subrayado. "Estamos dispuestos a empuñar las armas para defender el suelo sagrado de la patria de Chávez", ha asegurado.
Maduro ha dado los nombres de su equipo para las elecciones presidenciales, el 'equipo de campaña Hugo Chávez', rodeándose de los chavistas que han acompañado al anterior presidente, como Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Popular, y su mujer, la procuradora general de Venezuela, Cilia Flores. "El 14 de abril no es a mí a quien votáis, sino a Chávez", ha gritado.
Promesas y retos
"El pueblo tiene en mí a un protector seguro", ha defendido Maduro, al tiempo que ha manifestado que Venezuela tiene delante "grande retos" que superarán con el programa de Chávez. El dirigente del PSUV ha asegurado que mantendrá las misiones bolivarianas y la contratación de médicos cubanos para mejorar los hospitales en caso de que gane los comicios .
Durante el acto, Maduro ha prometido que luchará contra la violencia reduciendo el número de armas en las calles. Para ello, el dirigente chavista ha explicado que seguirá con las campañas de intercambio de armas de fuego por juguetes o comida.
"Quiero convertirme en el presidente que salva Venezuela de la criminalidad, de la violencia y de la droga", ha manifestado Maduro. Además, ha solicitado "ayuda" a los congregados para poder luchar contra la "asquerosa corrupción" que "existen en algunos sectores políticos del país".
"Luchó por la vida del pueblo"
Maduro ha reiterado que Chávez fue el líder "más vilipendiado" del mundo durante los 200 años de independencia de Venezuela. "Ni siquiera, en la última etapa de su grave enfermedad (...) jamás se rindió, lucho por su vida, pero sobre todo, luchó por la vida de lo pobres de esta patria revolucionaria", ha manifestado.
El presidente encargado ha asegurado que el futuro de Venezuela pasa por "un tiempo de libertad y de democracia" frente a los grupos opositores que pretenden mantener al pueblo "esclavo". Además, ha calificado a la oposición de "vendepatrias" y ha destacado la lucha de Chávez frente al imperialismo, en referencia a Estados Unidos. Maduro ha indicado que "no permanecerán en silencio" y mantendrán la lucha de la revolución bolivariana.
Maduro ha criticado las palabras del candidato opositor, Henrique Capriles Radonski, que ha asegurado que no pensaba movilizar a su electorado en un acto al presentar su candidatura porque el país seguía de luto por Chávez. En este caso, el presidente encargado ha calificado a Capriles, sin nombrarle, de "mezquino" después de que los opositores celebrasen la muerte de Chávez en Miami.