Pese a que oficialmente nadie habla de pacto con Bárcenas, ninguno de los resortes del Gobierno se ha movido para incomodar al ex tesorero del PP. Hacienda, que dispone de convenio de intercambio de información con Uruguay, no ha pedido ni un solo papel más allá de lo que le han reclamado los jueces y la Inspección de Trabajo no ha investigado el contrato "simulado" que admitió el PP y que Bárcenas ha llevado a los tribunales.