La Comisión Europea (CE) ha vuelto a alertar este martes de la amenaza que a su juicio supone que firmas como la tecnológica china Huawei participen en el desarrollo de las redes 5G en Europa, y anunció que espera identificar proveedores que no considere seguros al cabo de una evaluación de riesgos. Fuentes de la Unión Europea confirmaron a Vozpópuli que la intención es no depender exclusivamente de la compañía china para la implantación de esta red.
"Teníamos que afrontar esto de cualquier modo, independientemente de quién haga las redes. Cualquier discusión sobre estos asuntos, inevitablemente acaba en China y en sus proveedores, pero no parte de ellos", explicó el comisario europeo de Unión por la Seguridad, Julian King, en una rueda de prensa tras la reunión semanal del Ejecutivo comunitario.
En esta ocasión, la Comisión aprobó unas recomendaciones sobre cómo hacer frente a las amenazas que pueden perjudicar la seguridad de estas nuevas redes de Internet.
La CE ha pedido a los Estados miembros que analicen posibles riesgos a nivel nacional para junio, para después hacer una revisión a nivel europeo y, antes de final de año, "desarrollar unos estándares mínimos comunes de ciberseguridad de las redes 5G".
Huawei tiene que cooperar con China
Ante la preocupación suscitada en la CE por empresas chinas como Huawei, que por ley tendrán que cooperar con los servicios secretos de su país, King dejó claro que "no hablamos hoy de prohibir, sino de un proceso basado en concienzudos análisis de los riesgos y los puntos débiles y un enfoque compartido para definir cuál es la mejor y más eficaz manera de lidiar con ellos".
"Pero también dejamos claro en el texto de recomendaciones que, al final de este proceso, hacia finales de año, cuando este trabajo esté hecho, las posibles medidas de mitigación podrían incluir identificar productos, servicios o proveedores considerados potencialmente no seguros", advirtió.
El texto aprobado por la CE habla de inventariar riesgos como los relacionados con marcos legales y políticos a los que pueden estar sujetos suministradores de equipos en terceros países, y de establecer medidas como la identificación de proveedores no seguros.
Más tajante se mostró el vicepresidente de la CE y responsable del Mercado Único Digital, Andrus Ansip, quien defendió la necesidad de proteger la privacidad y apuntó a "algunas preocupaciones específicas sobre empresas como Huawei".
Aunque dijo que las decisiones sobre problemas de seguridad nacional corresponden a los Estados miembros, éstos han pedido a la CE establecer un "enfoque común" sobre la situación.
Ansip aseguró que no habla de "vetar a cierto tipo de empresas", pero advirtió de que "cuando tengamos suficientes evidencias sólidas que podamos usar públicamente, ya será demasiado tarde para nosotros", por lo que pidió actuar sobre la evaluación de riesgos que hagan.
Por su parte, el representante de Huawei ante las instituciones de la UE, Abraham Liu, dijo en un comunicado que la empresa china "entiende las preocupaciones de ciberseguridad" de los reguladores europeos y confió en "contribuir al marco europeo de ciberseguridad" sobre la base de un "entendimiento mutuo".
"Estamos firmemente comprometidos con seguir trabajando con todos los reguladores y socios para que el despliegue del 5G en Europa sea un éxito", concluyó.