El consejo de administración de Bancaja que sirvió para airear el escándalo del enfrentamiento con su matriz sirvió también para tapar otro: el que habría supuesto hacer efectivo el pago de más de 14 millones de euros en concepto de prejubilación y provisiones sociales complementarias a Aurelio Izquierdo, al que se nombró nuevo director financiero de Bancaja. El Presidente del banco, José Luis Olivas, consiguió sacar adelante su reingreso en la entidad pese a tres votos en contra y tras haber sido rechazado en un consejo anterior.
Aurelio Izquierdo ha sido readmitido en la caja con un sueldo que ronda los 200.000 euros anuales (unos 100.000 fijos y otros tantos en concepto de complementos variables). Mientras siga recibiendo ese salario, Bancaja no tendrá que abonar los 14 millones de euros acumulados en concepto de fondo de prejubilación y otros fondos complementarios.
Evitando ese cese, la entidad evita también su segundo escándalo en una semana: el primero fue el de su negativa a acatar la decisión de su matriz, BFA-Bankia, que pretendía evaluar si la caja infló su valor en el momento de la fusión y el segundo es el de las indemnizaciones millonarias que algunos de sus ejecutivos tienen "latentes" y que podrán cobrar en el momento de su cese o jubilación.
Aurelio Izquierdo, un blindaje repudiado antes por la entidad
El nombramiento del nuevo director financiero ha salido adelante tras el segundo asalto del Presidente de Bancaja, José Luis Olivas. Su nombramiento fue abortado el pasado 18 de enero, cuando se proponía su contratación con un salario de 240.000 euros anuales. La labor del director financiero, después de que la entidad haya sido absorbida por Bankia, quedaba limitada a gestionar el dividendo de BFA entre los clientes de la caja valenciana. Ante esas limitación de funciones. La oposición abierta de cuatro de los 20 consejeros llevó a la entidad a ni siquiera someter el nombramiento a votación.
La resistencia de los consejeros a la propuesta del presidente José Luis Olivas se produjo, precisamente, después de que se hiciera público su salario. Olivas ganó 1,6 millones en 2011 gracias a su cargo como presidente de Bancaja, a la vicepresidencia que ocupó en Bankia y a su participación en el consejo de administración de Banco Financiero y de Ahorros (BFA)
Las remuneraciones serán parte de la auditoría que Bankia mantiene
Los fondos destinados a su prejubilación serán también auditados por la empresa independiente a la que contratará Bankia en las próximas semanas. La matriz ha decidido seguir adelante con la inspección de Bancaja pese a la resistencia de la entidad valenciana.
La investigación de esos fondos se centrará no sólo en las cuantías sino también en tres aspectos del procedimiento de aprobación: primero, esa dotación se hizo sin informar a los consejeros de Bancaja; segundo, los años en los que se aprobaron esos fondos, ya que –según fuentes de Bancaja—la dotación se mantuvo también durante los años de mayores apuros económicos de la entidad como 2009, 2010 y 2011, cuando la entidad valenciana tuvo que fusionarse con Bankia para sortear su situación económica y tercero, en por qué sigue sin hacerse pública a día de hoy. Aurelio Izquierdo no ha cumplido con el requisito del Banco de España de revelar las cuantías de sus remuneraciones, acogiéndose a la Ley de Protección de Datos.