Podemos quiere entrar en el Gobierno y de manera no testimonial. El partido de Pablo Iglesias aspira a ocupar varios ministerios y liderar la secretaría de los que pasarían a manos del PSOE. Algunos miembros de la formación hablan de “transversalidad ministerial” para desgranar ese concepto, según ha podido saber Vozpópuli. Todo queda pendiente del resultado electoral, pero en Podemos creen que la suma con los socialistas, PNV y ERC superará el umbral necesario para dibujar un ejecutivo rojo-morado.
Dependiendo del encaje de escaños, si sale la suma, Iglesias lo tiene claro. Su intención no será pedir el control de uno u otro ministerio a cambio de votarle la investidura a Pedro Sánchez, sino que planteará al candidato socialista un gobierno “equilibrado”, compuesto de manera paritaria (o casi paritaria) por dirigentes de ambas formaciones.
Ministerios y secretarias de Estado
Esto significa, por ejemplo, que si el PSOE obtiene el control de un ministerio, Podemos se quedará con el secretario de Estado o el director general de dicho departamento. Y en los que dirigirá Podemos (Iglesias pidió el del Interior), los socialistas estarán en la sala de máquinas, con altos cargos que garantizarán una presencia activa del partido de Sánchez y evitarán confrontaciones internas de un Ejecutivo ya fragmentado.
El secretario de Podemos ya está en conversaciones con Sánchez sobre esa idea. En definitiva, Iglesias cree que de esa forma el Consejo de Ministros no se convertirá en un reino de taifas y se alcanzará mayor coordinación entre ambas formaciones.
Iglesias cree que el Consejo de Ministros no se convierta en un reino de taifas y se alcance mayor coordinación con el PSOE
No obstante, algunas fuentes del partido morado aseguran a este diario que el PSOE evitará a toda costa dar su visto bueno antes de los comicios a un acuerdo de ese tipo. Y que mucho dependerá también del resultado que coseche Ciudadanos, aunque en Podemos aseguran: “Quedaremos por delante de Rivera, pero Vox subirá fuerte”.
En varios círculos de Podemos creen “posible” que el partido de Santiago Abascal acabe en tercera posición, pero aseguran que Iglesias adelantará a Albert Rivera y que de ser así se podrá llegar a un ejecutivo con Sánchez. Los últimos compases de la campaña electoral serán “clave”.
Faltan cinco días para el voto del 28 de abril y en Podemos aseguran que entre las bases ha calado el optimismo: el llamado “efecto Iglesias” ha empezado a cuajar y los sondeos internos dibujan escenarios mejorados ya desde poco antes de la Semana Santa, aseguran fuentes del partido morado.
El modelo Botànic
El modelo a seguir para el acuerdo con Sánchez es el del Botànic: el pacto valenciano que ha permitido al socialista Ximo Puig presidir la Generalitat Valenciana en coalición con Podemos y Compromís. El dirigente de Podemos Antonio Montiel fue uno de los tejedores de dicho acuerdo, al que se apuntó la candidata de Compromís, Mónica Oltra.
Quedaremos por delante de Rivera, pero Vox subirá fuerte”, aseguran en Podemos
Ese acuerdo vertebró un control compartido de las áreas de gobierno regional y selló la alianza a través de un documento programático pactado. Ese pacto de las izquierdas en Valencia evitó, además, que Puig se decantara por un Ejecutivo con Ciudadanos, después de un intento frustrado de acercamiento. Aunque fuentes conocedoras de dicho pacto recuerdan que ese esquema "solo funcionó en la primera etapa", y que luego derivó en una coalición tradicional. Y, finalmente, con una ruptura.
El modelo valenciano está siendo estudiado estos días por la cúpula de Podemos. Entonces, el PSOE hubiera podido decantarse por una alianza con Ciudadanos, pero el pacto de las izquierdas lo evitó. Y ahora tanto Iglesias como Irene Montero quieren impedir que el acuerdo con el partido naranja se haga efectivo después de los comicios generales del 28 de abril. Ambos dirigentes están alertando en todos sus mítines del “peligro” de un Gobierno entre Sánchez y Rivera.