La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) será la organizadora este sábado de la primera gran movilización del"otoño caliente" que espera al Gobierno de Pedro Sánchez por la acumulación de protestas para exigir una mejora en las condiciones laborales. Esta entidad contará con el apoyo de Jusapol y tiene, en principio, una previsión de 15.000 asistentes, según la documentación que han entregado a la Delegación del Gobierno.
Así, la manifestación se iniciará a las doce de la mañana de este sábado 24 de septiembre en la Carrera de San Jerónimo frente al Congreso de los Diputados. Discurrirá por el Paseo del Prado y terminará en la Plaza de Colón con la lectura de un documento.
El número de asistentes que se ha comunicado a la Delegación del Gobierno en Madrid que acudirán a la marcha del sábado será de 15.000. Esta previsión está realizada por los organizadores de la marcha, quienes, conforme a la ley, tienen que avisar con anterioridad el número de asistentes para que el departamento de Mercedes González establezca un dispositivo de seguridad conforme a estos datos.
Esperan decenas de miles de personas
La cifra que han presentado, que cuenta con toda la cautela del mundo, puede quedarse corta. Varias decenas de autobuses llenos de simpatizantes de ambos sindicatos se desplazarán a primera hora del sábado con destino la capital de España. "Esperamos decenas de miles de personas", explican fuentes de CSIF a Vozpópuli.
El presidente del sindicato, Miguel Borra, lleva semanas preparando esta cita. Al hilo de esto, ha reclamado al Gobierno una actualización de los salarios públicos en 2022, con carácter retroactivo, para recuperar el poder adquisitivo perdido este año. Una medida que ya se puso en marcha por Francia el pasado mes de julio.
Desde el CSIF también solicitan un acuerdo de subida salarial plurianual que permita avanzar en la recuperación del poder de compra mermado desde 2010. “La patronal de los empleados públicos que es el Gobierno desoye las recomendaciones de su ministra de Trabajo y no se quiere sentar a negociar”, advierten desde la agrupación. El colectivo de las administraciones estuvo en primera línea durante la crisis y merece mayor consideración por parte del Ejecutivo.
El descontento de la sociedad
Desde el sindicato aseguran que el regreso de las vacaciones este septiembre está siendo durísimo para los distintos colectivos. "Nosotros ofrecemos a la sociedad una posibilidad para que exprese su descontento. No es solo una reclamación para que suban los sueldos de los empleados públicos", advierten.
Uno de los focos sobre los que quieren presionar al Ejecutivo de Pedro Sánchez es el debate "honesto" sobre el futuro de las pensiones ya que en los últimos años se ha recortado el acceso a la jubilación anticipada. "Debe existir una jubilación digna a una edad razonable", reiteran.
También centra sus propuestas en el "deterioro" de los servicios públicos, algo que CSIF considera "inaceptable". "Desde la pandemia se ha puesto al descubierto las debilidades del sistema de la Administración General del Estado. Una prueba de ello es la situación del SEPE o los continuos retrasos en la renovación del DNI por la falta de funcionarios. Es una situación complicada", determinan.
De la mano de Jusapol
Esta protesta contará con el respaldo del Jusapol. El lema que portarán será el siguiente: "Por mí y por todos mis compañeros". El secretario general de Jupol, Aarón Rivero, ha asegurado a Vozpópuli que sus reivindicaciones se basarán, una vez más, en las equiparación salarial de los miembros de la Policía Nacional y la Guardia Civil con los agentes de los cuerpos autonómicos.
Buscan que estos agentes, que también son funcionarios, puedan recuperar el poder adquisitivo perdido desde el año 2010 y se se produzca un incremento del salario acorde con el IPC. "No ha cambiado nada desde la última manifestación en la que recorrimos las calles de Madrid. El diálogo con el Ministerio del Interior es inexistente", denuncia Rivero.
"Tenemos el apoyo de la sociedad"
El sindicato de Jupol ha solicitado en tres ocasiones mantener encuentros con el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá. El objetivo: tratar el tema de las jubilaciones de los policías nacionales y los guardias civiles. Estos funcionarios también son discriminados respetos a sus homólogos autonómicos.
El ministro ha rechazado todas las propuestas de reuniones. Jupol solicita que estos funcionarios se puedan jubilar con 59 años sin pérdida de poder adquisitivo. "El único organismo que nos ha escuchado es el Defensor del Pueblo. El resto dan la callada por respuesta", lamentan.
Rivero cree que la manifestación de este sábado será "multitudinaria" ya que cuentan con el "apoyo de toda la sociedad". "Somos servidores públicos y la sociedad lo sabe. Somos los únicos sindicatos que vamos a salir a la calle en una de las peores épocas de crisis. La gente sale a la calle a reivindicar, estará a la altura de cualquiera de las otras que hemos organizado", reflexiona.
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Leonidas
CSIF. Otro sindicato subvencionado cuyo presidente, celador de hospital, lleva sin trabajar lustros y pegándose la vida padre. Otra organización dónde se hereda la presidencia por el dedo del anterior.