La Comisión Nacional del Mercado de Valores quiere acceder a los registros de las llamadas de telefónicas con el objeto de actuar contra el abuso de mercado. Así lo ha explicado el presidente del organismo supervisor Sebastián Albella quien ha asegurado que "tenemos idea de plantear que se nos permita recuperar la capacidad de requerir a empresas de telecomunicaciones los registros de llamadas".
Según Albella, la CNMV ya disponía de esta herramienta hasta 2007, pero cuando cambió la legislación se dificultó su utilización por parte del supervisor. "Tenemos dificultades para obtener esos datos cuando los necesitamos", ha añadido.
Para Albella, la importancia de poder acceder a los registros reside en poder acreditar que se ha producido una llamada para que sea válido como prueba indiciaria, aunque ha reconocido que es "muy difícil" obtener una prueba directa de que ha existido información privilegiada. "El 'insider trading', el uso de información privilegiada, es un mundo donde lo importante es la prueba indiciaria", ha añadido.
Además, ha señalado que el supervisor tiene previsto pedir acceso al fichero centralizado de titularidades del Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención de Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias (Sepblac) con el objetivo de utilizar una herramienta "más eficaz", "más completa" y "más rápida" para sus investigaciones.
Según ha explicado, la Comisión planteará al Ministerio de Hacienda y Función Pública la puesta en marcha de estas dos medidas cuando exista un nuevo proyecto normativo en este campo.
Por otra parte, ha subrayado la necesidad de definir los procedimientos y los cauces adecuados para tramitar las denuncias, incluidas las anónimas. Según ha explicado Albella, la Comisión está obligada por la Directiva europea de Abuso de Mercado a establecer estos cauces y su objetivo es transmitir que se reciben denuncias anónimas "con normalidad".
En general, el presidente del supervisor de los mercados ha subrayado la necesidad de reforzar las herramientas de las que dispone la CNMV para prevenir el abuso de mercado, como las informáticas, que "son ya bastante potentes", pero aún existe "la posibilidad de mejorarlas".
