El fiscal anticorrupción Emilio Sánchez Ulled ha espetado en su informe al final del juicio que en la trama del expolio del Palau de la Música existía un círculo sociopolítico muy determinado en el que "parece que la bandera justifica casi cualquier atropello con la cartera".
"De unos años a esta parte, todo el mundo a rasgarse las vestiduras. Pero las vestiduras se tenían que haber rasgado muchísimo antes", ha considerado el fiscal este lunes en la introducción de su informe final del juicio, que está previsto que desarrolle durante los dos próximas sesiones.
Ulled ha calificado de "tremendo" el "patético papel" de las entidades públicas que tenían que controlar la instalación, expoliada por su entonces presidente Fèlix Millet y su 'número dos' Jordi Montull: "Ha quedado plasmada la prepotencia de mucha gente que se creía intocable".