Islandia pone fin a la brecha salarial. Este mes, se ha convertido en el primer país del mundo en prohibir por ley que los hombres puedan cobrar más que las mujeres en los trabajos de la misma categoría. La ley, que entró en vigor el pasado 1 de enero, establece que la diferencia salarial por género es ilegal, tanto en empresas privadas como en empresas públicas con más de 25 trabajadores.
Así, por ley, ahora las empresas con más de 25 empleados deberán hacer públicos los salarios. Y aquellas compañías que incumplan con la normativa, se verán sometidas a sanciones económicas aún no establecidas. Como parte de la regla, el gobierno auditará a las compañías y exigirá el "certificado de igualdad salarial".
La ley entra en vigor tras ocho años de trabajo de asociaciones, agentes sociales, los ministerios de Bienestar y Finanzas y a la primer ministra del país, Katrín Jakobsdóttir, la segunda jefa del Gobierno mujer que ha tenido Islandia.
Aunque en otros países se obliga informar la diferencia salarial según el género, es la primera vez que un país hace obligatorio para empresas privadas y públicas que demuestren la igualdad en los salarios.
El objetivo, ha explicado en otras ocasiones a la prensa el ministro de Asuntos Sociales e Igualdad, es que para 2022 la diferencia de sueldos por el mismo empleo sea inexistente.