Apenas restan dos semanas para que se celebre el sorteo extraordinario de la Lotería de Navidad. Este año se repartirán más de 2.000 millones de euros El del Gordo es, obviamente, el más buscado, dotado con 400.000 euros el décimo. Pero lo que no es tan conocido es por qué se denomina de esta manera al mayor premio.
El personaje, de cuerpo bajo y rechoncho, vio la luz por primera vez en el siglo XVIII. Desde entonces, su figura sirvió para publicitar la Lotería. Eso sí, no empezó siendo conocido como el Gordo. Antes de eso, fue apareciendo en numerosos libros y estampas de la época. Iba ataviado con un traje lleno de las bolas típicas que se utilizan hoy en día en la Lotería de Navidad.
Su misión era alentar a la gente a que jugase la Lotería. De hecho, su imagen solía ir acompañada de textos como el siguiente: "De alegría y de dinero, este enano afortunado, si le estudias con esmero, te enseñará alborozado, de la fortuna el sendero”.
Este curioso personaje también dio nombre a un periódico, que nació en 1851 y que llevaba como título de cabecera 'El enano. Su primer número incluía un soneto dedicado a los jugadores del sorteo extraordinario de la lotería.
Qué fue antes el Gordo o la Lotería de Navidad
Lo cierto es que quien la primera aparición la hizo el Gordo. El primer sorteo de lo que se denominaría Lotería de Navidad tal y como hoy la conocemos llegó el 23 de diciembre de 1892. Tardaría, eso sí, cinco años en aparecer como denominación en el boleto.
Aunque su origen, el del sorteo extraordinaria, se remonta a a época de las Cortes de Cádiz. El ministro de la Cámara de Indias, con la 'excusa' de elevar los ingresos públicos, ideó el primer sorteo -que luego pasaría a llamarse Lotería de Navidad- en diciembre de 1811.
El primer Gordo recayó en el 03604. El precio del décimo eran 40 reales y el premio fue de 8.000 pesetas.