Un varón migrante que pretendía cruzar a nado el río Bidasoa desde Irún hacia territorio francés ha fallecido ahogado este domingo. Otro hombre que lo acompañaba ha conseguido sin embargo su objetivo, según ha informado el Departamento de Seguridad del País Vasco. Es el segundo caso de ahogamiento de un migrante en este río en pocos meses.
El suceso ha tenido lugar hacia las diez menos cuarto de esta mañana, momento en que un vecino de la zona ha visto cómo una de las personas que intentaba cruzar el río se ha hundido nada más entrar en el agua y ha desaparecido. La intensa fuerza de la corriente ha obligado al testigo de los hechos a tener que salir del agua por sus medios.
Tras ser alertados del suceso, un técnico de atención de emergencias del Gobierno Vasco ha solicitado la presencia en el lugar de un helicóptero de la Ertzaintza con configuración de buceo, buzos de Cruz Roja de Hondarribia y de los Bomberos, así como una dotación de la Unidad de Vigilancia y Rescate de Montaña y patrullas de Seguridad Ciudadana de la Ertzaintza para recorrer la ribera del río.
Pese a todo, poco después se ha informado de que el varón desaparecido ha sido hallado en el río. Los bomberos han recuperado el cuerpo, que se encontraba en parada cardio-respiratoria, y se le ha comenzado a realizar la RCP. El médico de la ambulancia de Osakidetza ha certificado su fallecimiento minutos después.
La Ertzaintza ha abierto una investigación para esclarecer los datos de esta persona, que está aún sin identificar y cuya edad se desconoce.
"Un fracaso colectivo"
El delegado del Gobierno en el País Vasco, Denis Itxaso, ha afirmado que la muerte este domingo de un migrante en el río Bidasoa supone "una tragedia humana y un fracaso colectivo".
"Migrantes en tránsito que encuentran la muerte en el camino hacia nueva vida. Una tragedia humana y un fracaso colectivo que no debe pasar desapercibida si se tiene un mínimo sentido de la justicia", ha afirmado Itxaso, que ha mandado un "abrazo solidario para sus familiares y amigos".
