El mundo de la noche ha elevado su media de edad en las dos últimas décadas y ya se sitúa en los 32 años, cuando a principios de siglo el perfil era de jóvenes de unos 24 años, una tendencia que, según los empresarios de ocio nocturno, es “irreversible” y se incrementará a medida que pasen los años.
La Federación de Asociaciones de Ocio Nocturno (Fasyde) ha llegado a la conclusión de que su público es cada vez más “adulto” y, aunque parezca una incoherencia, demanda un ocio de la noche “más diurno, cultural y familiar”.
Al tiempo que los clientes son más mayores, quienes trabajan en la noche son cada vez más jóvenes. Entre los 200.000 empleos que genera el sector del ocio nocturno en España, uno de cada tres trabajadores es menor de 30 años. Y es que este tipo de empleos suponen la primera vía de entrada al mundo laboral para muchos jóvenes, explicó la patronal.
En este sentido, los empresarios proponen ampliar las franjas horarias más diurnas para desarrollar sus actividades, impulsando la “modernización de las empresas en un marco de seguridad jurídica que permitan luchar contra el intrusismo y la competencia desleal”.
Motivo de este cambio
El aumento de la media de edad entre quienes salen de fiesta puede deberse al bajo nivel de ingresos de los jóvenes.
Según el último informe de pobreza del Consejo de la Juventud de España, ya son casi dos millones los jóvenes entre 16 y 29 años que están en situación de pobreza relativa y 600.000 en pobreza severa, mientras que la tasa de paro juvenil se encuentra por encima del 30%.