Según las informaciones facilitadas por la agencia estatal egipcia de noticias, MENA, un total de 292 presuntos miembros del grupo yihadista Estado Islámico han sido enviados a un tribunal militar imputados por dichos cargos.
Fuentes judiciales citadas por el diario local 'Al Ahram' han señalado que la fiscalía militar publicará próximamente las confesiones de algunos de los detenidos.
Las investigaciones apuntan a que los sospechosos planificaron dos intentos de asesinato contra el presidente, el primero de ellos en 2014 cuando peregrinó a La Meca.
El segundo y último intento de asesinato, que también tenía como objetivo al príncipe heredero saudí, Mohamed bin Nayef, involucraba a células terroristas en ambos países.
Este segundo plan terrorista contemplaba un atentado con bomba contra el convoy de Al Sisi en la capital egipcia, El Cairo. La Fiscalía no ha detallado cómo fueron desarticulados estos intentos de asesinato.
Sin embargo, sí ha señalado que estos planes eran parte de un complot para derrocar al Gobierno que contemplaba además el asesinato del exministro del Interior Mohamed Ibrahim por su papel en la represión de las acampadas en la capital en 2013, que se saldaron con centenares de muertos.
Las acampadas fueron llevadas a cabo en dos de las principales plazas de El Cairo en protesta por el derrocamiento en julio de ese año del entonces presidente, Mohamed Mursi, en un golpe liderado por Al Sisi, entonces jefe del Ejército.