"Yo fui jugador internacional y a veces también bebía. Tuve suerte de que no hubiera imágenes. Somos personas y somos suficientemente mayores para asumir la responsabilidad. Pero es la vida privada", comentó el catalán este viernes en rueda de prensa, uniéndose a la defensa que horas antes había realizado el técnico del Liverpool FC, Juergen Klopp, que admitió sentir que se había producido una reacción exagerada.
Rooney pidió perdón después de ser captado ebrio en una boda tras la victoria de Inglaterra sobre Escocia en Wembley. Sin embargo, Guardiola, lejos de criticar al capitán del United, se mostró comprensivo recordando sus episodios en su etapa como futbolista profesional.
"No me gusta cuando la gente comenta sobre mi vida privada, así que no comentaré. Tengo mucho respeto hacia la carrera de Wayne Rooney", explicó el míster, centrado en su compromiso liguero de este sábado contra el Crystal Palace.