En aquellas elecciones el PP logró 156 diputados, mientras que el PSOE tenía 141; IU tenía 21; CiU, 16; PNV, 5; Coalición Canaria, 4; BNG, 2; HB, 2 y ERC contaba con 1 escaño. Una distribución muy distinta a la actual y en la que la suma del PP con los nacionalistas de CiU y PNV daba mayoría absoluta. Pero a pesar de ello, el Grupo Popular tenía que negociar con los grupos todas las iniciativas que llevara el Gobierno al Parlamento.
Ahora, el resultado es muy distinto, porque si bien el PP ha ganado las elecciones, no lo ha hecho con la holgura que lo hizo entonces José María Aznar y ha logrado 137 escaños, seguido de PSOE con 85, Podemos con 71, Ciudadanos con 32, ERC con 9, CDC con 8, PNV con, EH Bildu con 2 y Coalición Canaria con 1.
En aquel momento se optó por tener representantes en el Grupo Popular que eran los enlaces en cada materia con el resto de los partidos. En esta ocasión, el Grupo ha copiado la estructura y canalizará las directrices que dé el Ejecutivo de Mariano Rajoy y que recibirá a través de la Secretaría de Estado de Relaciones con las Cortes que tendrá comunicación estrecha con el portavoz del Grupo Popular en el Congreso.
Rafael Hernando, a su vez, contará con una estructura muy engrasada de portavoces adjuntos que harán de enlaces con los representantes que designen el resto de las fuerzas políticas en las distintas materias.
Esta Legislatura se perfila aún más complicada que la primera de José María Aznar ya que los actores han cambiado, al haber entrado en escena dos partidos nuevos, Podemos y Ciudadanos, y también porque además de cambiar la correlación de fuerzas de las distintas formaciones, los nacionalistas catalanes ya no son proclives a los pactos con el Ejecutivo al estar inmersos en la estrategia independentista.
Aunque en el caso de los Presupuestos Generales del Estado para 2017 ha sido la vicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría la que ha empezado la negociación política con una ronda con los portavoces parlamentarios, también han entrado en la negociación económica más directa los ministros del ramo, Luis de Guindos y Cristóbal Montoro.
